Una agradable velada [Cécile Leblanc]

James entro en Las Tres Escobas sonriente, como era costumbre en él. Saludo a la camarera y se fue a sentar en una de las mesas mas escondidas del local y tambien una de las mas tranquilas, tras pedir una cerveza de mantequilla se quito el abrigo oscuro con el que habia salio del castillo para quedar con una blusa roja de manga corta con el escudo de Gryffindor y unos pantalones tejanos oscuros.

- Gracias, guapa- le dijo a la camarera cuando este le sirvio la cerveza y se retiro. La chica se sonrojo visiblemente y el orgullo de James aumento.

El muchacho se tomo el primer sorbo de la deliciosa bebida mientras esperaba alguien con quien charlar.

James estaba mirando atentamente cada rincon del local cuando vio a una atractiva muchacha entrando en el local. La muchacha tambien se fijo en él y le sonrio, ella como un total caballero fue a su lado a la barra.

- Te invito si vienes a mi mesa a charlar un rato- le dijo el chico sacando un par de galeones y dejandolos encima del mostrador- no pienso permitir que una chica tan guapa se me escape.

El chico le hizo una pequeña reverencia y le mostro el camino que la llevaria hasta su mesa sonriendole con su impecable sonrisa blanca y su par de ojos verdes brillandole con entusiasmo.

James sonrio satisfecho al ver que la chica le sonreia y aceptaba su peticion. Espero que el camarero le sirviera el té en la mesa donde se sentarian, segundos despues enretiro una de las sillas cerca que habia alrededor de la mesa.

- Adelante, sientate- le dijo señalandole la silla que habia enretirado con una sonrisa- me alegro que hayas aceptado mi invitacion, me estaba aburriendo mucho. Mi nombre es James, James Anderson. Un placer.

El muchacho escucho las primeras palabras de la chica con atencion mientras tomaba un sorbo del café bien cargado que habia pedido.

- Si, Hogwarts, sexto curso, Gryffindor- narro mientras sonreia tranquilamente.

La muchacha se presento con el nombre de Cécile Leblanc, un nombre nada comun en el Regno Unido, James deducio rapidamente que seguramente se trataria de francesa, le parecia una muchacha atractiva y rubia, claramente francesa. Sonrio ante sus propios pensamientos y él tambien extendio la mano para besar el dorso de esta como un total caballero.
Eso era lo que siempre le habia inculcado su padre y jamas queria perder el respeto hacia una chica y mas si parecia de elevado rango como lo era Cécile.

- ¿Tu tambien estudias en Hogwarts?

James siguio contemplando a Cécile quien cada vez que hablaba se le hacia una chica mas interesante, sonrio ante su pregunta.

- Supongo que esperar a que llegara alguien tan interesante como tú para alegrarme el dia- le dijo él tomando un sorbo de café mientras sonreia tranquilamente.

El estres de estar encerrado las 24 horas en un internado lo volvian loco y jamas le iba mal salir a tomar una copa en Hogsmeada. Satisfecho ante el amargo café miro a los ojos a la muchacha quien se le hacia irresistible.

- ¿Ascendencia francesa, quizas?- pregunto como si nada- tienes un aire exotico muy curioso..

- Paris.. un lugar precioso, he viajado alguna vez con mis padres, mi madre ama esa ciudad- dijo James con una sonrisa y tomando otro sorbo mas de su bebida.

Sus ojos verdes miraban fijamente a Cécile quien cada vez se le hacia una chica mas interesante y mas de su agrado. Des de que habia llegado a la escuela habia conocido a muchas chicas, atractivas, inteligentes, divertidas.. pero tenia que reconocer que esa chica francesa tenia algo diferente al resto que le atraia inevitablemente.
Sonrio ante el comentario de la chica.

- Pues si, soy muy ingles, como dices tu- acepto él- nací en Londres y me he criado toda mi vida a la capital britanica, es un lugar fascinante.. ¿te gusta el Regno Unido?- pregunto por pura curiosidad.

Miro los brazos de la chica y vio que se le habia erizado un poco el pelo al mismo tiempo que enrojecia, el chico se limito a sonreir ante las reacciones de la chica y a tomar un poco mas de su caliente bebida.

James escucho algo sorprendido lo que le decia la chica.
Se le hacia extraño pensar en algo indiferente al regno unido, habia vivido tan unico a él, habia estado presente en su vida siempre y no se imaginaba no estar en él.
Se encogio de hombros ante la pregunta de la chica.

- Me gusta este lugar, es relajante huir de la rutina de Hogwarts de vez en cuando pero es algo pequeño, siempre he preferido las ciudades grandes y con movimiento, la rutina me aburre- acepto James bebiendo él tambien un poco de su bebida- aún asi vengo mas seguido de lo normal.

El muchacho se la quedo mirando mientras pensaba y analizaba cada pequeño detalle del pueblo.

- Creo que La Casa de los gritos es el lugar que mas me agrada de este pueblo, a pesar de su fama de estar encantada te puedo jurar y perjurar que es totalmente falso, yo he ido algunas veces y es un lugar muy relajante, si algun dia estas muy estrasada por los deberes y la rutina escolar te recomiendo que vayas, es genial.