De vuelta por Hogsmeade [Andrew]

Otro fin de semana más había decidido irse a Hogsmeade, simplemente por alejarse lo máximo posible del colegio y de todos los líos familiares que aquello suponía, en realidad no tenía mucho que hacer por lo que al llegar a la entrada de la ciudad caminó sin mucho sentido hasta la plaza. Hacía buen tiempo para ser tan temprano, un par de nubes adornaban el cielo, pero todo indicaba que el verano estaba al caer, y con él el ansiado fin de curso.

Aquel pensamiento pareció reconfortarla mientras se sentaba en uno de los bancos de piedra que se encontraban en los alrededores del lugar, dejó escapar un suspiro de alivio al verse libre del castillo.

Necesitaba una pluma nueva, así que decidí ir a Hogsmeade. Pasando por la plaza vi a una chica que me sonaba muchísimo, sentada en un banco.
Oh, claro, era Chloris, de Ravenclaw.Una chica que, según habia oido, tenía un primo en Slytherin, igual que yo.

- Hola... - murmuré, acercándome a ella -. Eres Chloris, ¿verdad?

Me senté a su lado, descansando las piernas.

Escuchó la voz del chico que se había sentado a su lado, al verlo le pareció bastante conocido, hasta que rápidamente cayó en la cuenta, era Andrew, el primo de aquella chica de Slytherin, Gisèlle.

- Sí, claro, soy yo. -Contestó con una sonrisa- ¿Andrew, verdad? -Preguntó apartándose un mechón de pelo de delante de los ojos, sorprendida de verlo por allí.

- Así es... - contesté, asintiendo con la cabeza.

Estiré los brazos, y me froté los ojos, por sueño y cansancio. Esa noche casi no habia dormido, y estaba agotado. ¿Quien me mandaría a mi engancharme tanto a un libro como para dejar que no pudiera dormir hasta acabarlo?

- ¿Y que haces por aquí, señorita Chloris?

- Aburrirme... -Suspiró estirando los brazos para desperezarse; difícilmente enfocaba la vista pues el sueño se apoeraba de ella por momentos-

Se frotó los ojos intentando dejar de pensar en el baile de aquella tarde que tanto esperaba. Los abrió con auténtica parsimonia pues estaba literalmente en otro mundo.

-¿Tú no...?-Fijó su mirada en la de él buscando una respuesta que pudiese ayudarla a variar sus pensamientos.

- Bueno, yo bajaba para comprarme una pluma, necesito una nueva

Diije eso pasándome la mano por el pelo, cosa por la que me maldecí immediatamente. Tenía que dejar de hacer eso...

- Pero supongo que si me quedo aquí seré de más ayuda... Es decir, intentaré que no te aburras, si quieres. No te aseguro que lo consiga, pero por intentarlo...