Conociendonos (Saskia Seufzer)

Subía por las escaleras totalmente aburrida, pues sus compañeros de Raveclaw no solían hablar de artes oscuras, que resultaba ser su tema favorito, por lo que solía pasarse las horas de comida en un absoluto y total silencio.
Entró en la sala común algo distraída y se topó de frente con una chica saludándola y presentándose. Veía como aquella jóven le tendía la mano. Le resultaba raro, ya que nunca estuvo acostumbrada a los gestos de afecto pues su padre siempre fue muy frío y estricto con él y con su hermano. Como apenas estaba conociendo a aquella chica, pensó que debía ser cortés por lo que le acercó lentamente su mano hasta estrecharla con la de ella. Como aquella situación le resultaba algo extraña soltó la mano de su compañera algo brusca, pero sin esa intención.
- Hallo. Yo soy Saskia Seufzer. Encantada.

Siguió con la mirada a aquella chica que se sentó en el sillón volviendo a la lectura, que probablemente había mantenido con anterioridad a que ella apareciese en aquella sala. Clavó la mirada en el libro y se sorprendió al ver que era sobre artes oscuras. Pensaba que solo ella estaba interesada en ese tema de los alumnos de Ravenclaw, pero al parecer se equivocaba. Una leve sonría quisó aparecer en la comisura de sus labios pero la reprimió sin dejar de contemplar el libro que atrajo su atención. Puede que aquella chica fuera la persona adecuada para dejar fluir su lado más sádico, pero aún así no hablaría más de lo conveniente hasta conocer más a esa jóven.
- Puede ser...¿Por qué lo preguntas?.

No podía dejar de mirar el libro que sostenía aquella chica. Era como si hubiese quedado hipnotizada al leer "Artes oscuras" en la portada del libro. ¿Estaría bien revelar su pasión por la magia oscura?. Bueno, en Alemania todos sabían que su familia era conocida por practicar artes oscuras...pero ¿sería adecuado demostrar sus dotes para este tipo de hechizos?. Por ahora pensó que sería mejor mantenerlo en secreto.
- Una alemana...no estoy segura del nombre...no era lo que más me interesara en ese momento.
No quería ser descortés con la única persona de Ravenclaw que podría entender su afición a lo prohibido...pero su padre le ordenó que no se hiciera notar entre los demás alumnos, y eso haría sin importar las consecuencias.