Descanso.

*Llegue a la sala común me me senté en el sofá individual que estaba frente a la mesa de centro, serví una taza de chocolate caliente y le vertí una pequeña pizca de mi medicina. Relajandome cerré los ojos y me recosté hacia atrás aunque dentro de mi mente no podia dejar de pensar en las clases y todo eso.*

-Espero no olvidar la poción como la ultima vez-

*Dije en voz alta, acostumbro mucho eso.*

La sala común estaba casi a la mitad cuando bajé al centro, junto a los sillones. La mayoría estaba en Hogsmeade atraídos por las múltiples entretenciones que los locales ofrecían a los estudiantes en vacaciones, pero yo no estaba muy interesada. Quería aprovechar mis vacaciones para perfeccionar mis pociones y estando con clases no podía concentrarme realmente en lo que quería mejorar, pues acataba las órdenes de un profesor —las cuales desdeñaba— en vez de seguir mis propios deseos. Eso iba en contra de mi naturaleza.

Estaba tan concentrada en lo que iba a hacer que solamente un comentario lanzado al aire desvió mi atención.

Un chico en el mismo lugar había dicho —mas bien pensado en voz alta— que esperaba no olvidar la poción como la última vez. Volteé a mirarlo sorprendida. Si el hacer una poción era algo peligroso, el no saber las medidas y los ingredientes podía ser fatal. Alguien desde el cielo o de donde fuera debía estar cuidando a ese muchacho.

—Sabes, es bueno que estemos en vacaciones —le hablé pausadamente, arrastrando las palabras— Si estuviéramos en clases y hubieras dicho eso, el profesor no te hubiera dejado en paz y nos hubiera descontado puntos.

Voltée rápidamente al escuchar la voz de aquella chica que me tomó por sorpresa y mientras me integraba nuevamente en el sofá derramé accidentalmente la taza de chocolate caliente que estaba bebiendo, en un intento inutil y torpe de limpiar el desorden subí la mirdada y le dije.

-Creí que estaba solo-

La mire por unos segundos a los ojos pero no pude soportar los nervios que me había causado el hecho de que me escucharan hablar acerca de mi medicina así que desvié mi mirada hacia el charco de chocolate del suelo y con una sacudida de varita el liquido regresó a la taza.

Debido a mi cautela y usual silencio con el que entraba a un lugar, no todos se percataban de mi presencia y como consecuencia de eso acababa por sorprender a la gente. Para mala suerte de mi compañero, se había asombrado cuando tenía una taza de chocolate caliente en la mano y terminó por derramar.

"Es difícil estar solo en la sala común" le dije mientras me acercaba a él "Aunque estemos de vacaciones, casi siempre hay alguien. Por cierto, ¿a qué poción te referías?"

Pensé que era una buena ocasión para ofrecer mi ayuda con pociones. Así podría practicar para mejorar en su preparación y a la vez estaría ayudando a Slytherin a obtener más puntos si auxiliaba a mi compañero.

Nunca fui bueno controlando los nervios o la presión y eso me trae muchos problemas al momento de mentir, soy una persona callada y eso hace que me sea aún más dificil expresarme.
Retrocedí un paso al sentir que la chica se acercaba pero el sofá interrumpió mi retirada. No sabía que hacer en ese momento, la torpeza se apoderó de cada centimetro de mi cuerpo. Disimulando el nerviosismo la miré y le dije.

-No creo que sea muy importante, no es tanto así como una poción en su totalidad-

Me costaba mucho trabajo sostener mi mirada sobre sus ojos por que su mirada era bastante intimidadora y no podía evitar que mis ojos salieran de su orbita dando a notar mi mala actuación al momento de mentir..

Me di cuenta de que estaba muy nervioso y que me estaba mintiendo. Era el primer Slytherin que conocía que se intimidaba a tal grado por mi sola presencia. Iba a hacer que saliera de ese estado. Suspiré profundamente. Esperaba que no me tomara mucho trabajo entenderme con él, después de todo éramos de la misma casa.

"Respira, no hay necesidad de que te agites tanto" le hice saber

Esperé a que regulara su respiración para seguir intentando hablar con él. Si me estaba mintiendo era porque ocultaba cosas, pero ¿qué razón podía tener para ocultarme cosas tan poco personales como las pociones? Quería averiguarlo y no me iría de ahí sin saber.

"Si es como dices y no es tan importante, entonces no habrá problema en que me platiques de ello" dije sentándome a su lado.

Yo seguía un poco preocupado, habría preferido no hablar con ella pero al momento de que ella se sentó en el sofá super que no se iría sin una respuesta creible. La miré unos segundos mientras buscaba las palabras apropiadas para explicarselo. Me incliné en mi asiento y entrelazé los dedos de mis manos, respiré profundo y volví a agachar mi cabeza, mirando hacia el suelo le dije.

-Pues...-
Sustuve la respiración por unos segundos y después lo dejé salir con una gran exhalación para que todo pasara rápido.
-Es una poción que mantiene mi estado físico estable-

Tome el frasco donde guardo la infusión y empeze a jugar con su tapa, abriendola y cerrandola con inquietud. No sabía como iba a responder ella ante mi respuesta y al percibir su curiosidad empezé a preguntarme si era correcto que por fin alguien en la escuela supiera acerca de mi problema.

Si tomaba pociones para mantenerse estable era porque no todo era normal en él. Imaginé dos cosas. Una que debía ser enfermizo y la otra que podía tratarse de un hombre lobo. Opté que debía ser la segunda opción.

"No le temo a los licántropos" dije como si se tratase de lo más antural del mundo "Si eso era lo que te preocupaba, conmigo no tienes que temer. Quería que me lo dijeras para saber a lo que me enfrentaba"

Había leído sobre hombres lobo en un libro. Si no había luna llena no había problema y menos si tenían su poción. Sospechaba que los nervios no lo dejaban concentrarse en fabricar su medicamento, porque alguien que ha sido licántropo durante toda su vida debería saber al revés y al derecho cómo prepararla. Suponía que ahora que le había hecho saber que me había enterado de su secreto tendría que hablar con mayor libertad de ese asunto conmigo.

Al escuchar su rápida y acertada deducción me exalté y fue bastante notorio mi rostro de sorpresa, despues de unos segundos de quedar suspendido en la nada reaccione y pude comprender que ella quería ayudarme y que no temía ser atacada como las otras personas que han sabido de mi secreto.

-No he sufrido transformaciones desde los seis años- Le dije mientras guardaba el frasco en mis bolsas para poder sostener una charla seria con ella -O por lo menos eso dicen mis padres... Bueno, excepto una vez hace apenas unos meses antes de entrar a Hogwarts-

La sangre en mi cuerpo se puso tan fría como un hielo, sentí un enorme nudo en la garganta al recordar lo que había pasado ese verano... Aún no podía superarlo. Tratando de disimular esa tristeza la miré al rostro y le sonreí sutilmente, anque a juzgar por la personalidad de aquella muchacha creo que no se tragará esa sonrisita tan fingida.

Al escucharlo pensé que era perfectamente comprensible que estuviera nervioso. Si se había transformado hace poco eso quería decir que la poción no lo estaba estabilizando lo suficiente como para confiar en su efectividad dentro de Hogwarts. Él debía estar mucho más asustado que cualquiera que se enterase de su secreto.

"Si no puedes confiar en tus medicamentos, entonces podrías confiar en la astronomía. Así por lo menos sabrías cuando hay luna llena y no correrías el riesgo de transformarte en medio del pasillo frente a todo el colegio" le sugerí.

Ahora que sabía de su condición pensé que siendo controlado estaba lejos de ser una amenaza. Esa como volar un hipogrifo, sólo que esta vez se trataba de una persona y aún más que eso, un compañero.

(El diccionario dejói de funcionar justo cuando tenia que buscar algo para rolear xDD)

No sé exactamente como fue que sicedió pero en esa chica había algo que me hacía querer confiar en ella, no era como cualquier Slytherin... bueno porlomenos no era una altanera.

-Así es, los días de luna llena soy aún más raro de lo normal- la broma salió repentinamente, como si mi subconciente me dijera que me hiciera amigo de esa joven -Saliendo de bromas... no puedo estar seguro de que solo los días de luna llena me transformaré, mis padres dicen que siendo pequeño solia permanecer en forma de hombre lobo hasta por 3 días... cosa que encuentro inexplicable.

Me angustié al recordar ese pequeño detalle.

Si había algo que había aprendido era que tenía que saber usar la altanería con las personas correspondientes. De nada me servía ser engreída con Ehtan, ya que no sabría nada de él cuando lo que quería era lo contrario. Hay veces en que lo peligroso te fascina y ese era mi caso. Más que una amenaza lo veía como una oportunidad para aprender lo que más pudiera de él si me lo permitía.

Mi interés aumentó considerablemente cuando dijo que había llegado a estar tres días transformado. Al parecer tenía ambas cosas: desequilibrio en su salud y licantropía. Quise compartirle mis conocimientos.

"Quizás si te preocupas más de tu salud se regularicen tus posibles transformaciones. Es lo mismo que con el sueño. Si no tienes buena salud el sueño va a ir variando en vez de ser regular. Aunque tengo que confesar que no sé si la salud de un hombro lobo se cuida de la misma manera que un hombre normal. ¿Cómo sueles cuidarte tú?"

La pregunta hacia mi salud fue algo verdaderamente nuevo, mis tranfsormaciones no tenian que ver absolutamente en nada con mi salud y tenía que aclararselo, así que le respondí.

-Jamás he usado un collar anti-pulgas si es lo que te preguntas- después de la pequeña broma me puse a hablar más enserio - Realmente no se si sea problema de salud, verás... soy adoptado y en mi cuerpo no hay cicatriz alguna que indique que yo haya sido mordido por un licantropo, la única explicación para mi caso es que soy hijo de un hombre lobo; el problema es qu no sé de quien se trate.

Después de compartir esta historia con ella mi mente empezó a crear preguntas y una de ellas era: ¿Por qué le estoy diciendo todo esto?... había olvidado la casa en la que me encuentro, Slytherin no se distingue por ser la casa de los amigables y leales, algo quería de mi esa chica y debía averiguarlo.

Ya sabía que el estado de salud no influenciaba mucho en la regularidad de sus transformaciones, era algo casi impredescible. Por lo que podía descartar esa teoría. Lo malo era que no sabía de dónde venía. Un mayor antecedente de su árbol genealógico podría dar una pista a este laberinto.

"El no saber sobre tu origen es un problema" le dije mientras me acomodaba en el sillón "Si supieras de quién eres hijo podrías contestar muchas preguntas. Entonces deberías pedir una investigación al ministerio de magia"

Al pronunciar la palabra "ministerio", me acordé inevitablemente de aquellos inmarsecibles días en que ese maldito muggle me mantenía encerrada para experimentar conmigo. Sólo lo asesiné accidentalmente en un momento de ira, el ministerio me encontró y devolvió a mis padres.

Cerré mi mente a esos recuerdos, porque si seguía pensando en ello lo único que conseguiría sería llenarme más de rabia. Estando con Ethan eso era totalmente innecesario, por lo que me volví a enfocar en él.

"No sé cómo te estás tomando esto, pero intento ayudarte porque si te descontrolas y transformas nuestra casa se verá igual de perjudicada que tú, tal vez más. Además aprender nunca está de más"

Al escuchar que solo so preocupaba por no perder puntos para Slytheri todo había quedado resuelto, era una simple razón y bastante buena a decir verdad. Me coloqué en medio de la sala y la miré a los ojos.

-Agradezco tu intención de ayudarme, y espero poder tomarte la palabra muy pronto... por ahora creo que es tiempo de irme a descansar un poco en mi cama, me he sentido muy mareado estos últimos días, espero verte luego y tener otra charla, aunque espero que no del mismo tema.

Me despedí con la mano y respirando profundo fuí directo a las recamaras obviamente pensando en lo que tramaba esa chica y por que tan extraña presencia,pero bueno, no era tiempo para esas cosas por que lo unico que pensaba era en quedarme en mi cama todo el resto del día.