Siendo Ardientes...

Estaba caminando por Hogsmade con una naturalidad impresionante, llegue a las tres escobas, vi que estaba casi vacío, solté un suspiro, teníamos que poner ambiente adolescente, esto parecía mas bien... ¡La sala de maestros! * únicamente con Snape * aburrido, eso lo describía...

Mire al encargado -- ¿Qué no hay música en este lugar? -- pregunte mientras me sentaba en un banco en la barra, el negó con la cabeza, lo mire extraño -- ¿le molesta si pongo música? -- pregunte animada, el negó.

Aparecí una rocola, ya que ¿De dondé sacaría un DJ?, y puse música, esperando de que alguien llegara y pudiéramos divertirnos un rato.

Después de todo ¿para eso es una salida a Hogsmade? ¿no? para divertirse....

Me acerque y puse un letrero en la puerta -- " lo que pasa en las tres escobas, se queda en las tres escobas"

Me quede en la barra, ya que el cantinero se fue a atender una llamada, en estos tiempos se le conoce como... bueno no quiero saber....

Recorría las calles de Hogsmeade con tranquilidad con mis compras en la mano, pase frente al local de las tres escobas y del interior se escuchaba una melodía muy animada, leí el letrero que había en la puerta, me pareció divertido a sí que decidí entrar, no habia muchas personas pero el rostro de una chica en la barra me resulto familiar, era una amiga y compañera de casa

-Hola Aricia-salude con una sonrisa al acercarme a ella- este lugar parece muerto-le dije al mirar a nuestro alrededor- un poco mas de ambiente le vendría bien al lugar-saque mi varita y le apunte a la rocola y el volumen aumento-mucho mejor-dije sonriendo-ahora solo faltan chicos para poder bailar

Que flojera me da Londres, mas que nada el mudo mágico.
O por lo menos eso pensaba hasta que llegue a un lugar, algo feo por dentro, pero con música animada, me acerque y vi el letrero, sonreí.

Abrí la puerta y entre, allí había dos mujeres muy, muy hermosas.
Me acerque y les sonreí.

— ¿qué le paso a este lugar_— pregunte animado.

Dicen que lo mejor para olvidarse de los malos momentos es pasar un tiempo con tus amigos, yo no creia que fuese verdad. Mucho mejor era pasarlo con completos desconocidos. Entre a las tres escobas esperando ver un bar simple donde poder conocer gente, pero me encontre con que el bar se habia transformado en casi una disco muggle. Habian dos chicas junto a un chico, el grupo se veia prometedor y pense en acercarme, pero vi a un chico alejado, parado mirando a las chicas y sonrei traviesa. Me acerque despacio a el, como lo hace una criatura, sin dejar que el sonido me delatara y susurre en su oido- ¿me esperabas, cariño?- me apoye en el y le sonrei.

Por las calles de Hogsmeade corria el rumor de que en las tres escobas se estaba lleando acabo una fiesta que parecía tener buen ambiente, llevado por la curiosidad y por buscar diversión me dirigi hacia ese lugar, mientras mas me acercaba a la calle la música se escucha con claridad, varias personas se congregaban afuera del local, pasando entre ellas logre llegar a la puerta leí el letrero de la puerta lo que me pareció una estupenda frase.

Al entrar habían varias personas reunidas, una de las chicas me resulto familiar, aun a si me acerque a la barra para pedir algo de beber, al tener mi copa en la mano me gire a ver a las personas que ahí se encontraban, chicas hermosas y uno que otro compañero de casa, también vi a un Griffindro, esperaba que la fiesta comenzara a tomar mejor ambiente porque merecía la pena que a si fuera

Valla, hacer uno que otro arreglo a este lugar le daba buena fama, los chicos eran lindos, ninguno que llamara mi atención, pero lindos.

Tome un wisky de fuego, el cual me motivo a bailar, me acerque y quite un par de mesas, y ahí, como si no hubiera nadie me puse a bailar, como lo dictaba la canción -- sexy chika-david guetta-- esperaba que alguien mas lo hiciera, así que jale a Helena, una de mis compañeras de casa y ambas comenzamos a bailar...

Vi a la slytherin bailar y yo tambien quise bailar, las veelas eramos conocidas en todo el mundo por hechizar a los hombres con nuestros bailes, mire el anillo en mi dedo cuando Aricia me atrajo al "salon de baile" con el anillo en mi dedo definitivamente el efecto de mi baile no podia ser peligroso. Mire a Aricia de quien sabia que era una veela y me preocupe un poco por los humanos. Despues cerre los ojos y empeze a bailar al son de la musica, seguir el ritmo era algo natural en mi, al bailar pareciera que mis pies flotaban en el pise. Me sentia libre y mas yo, mas criatura, menos humana. Me relaje inmediatamente y con mi poder llame a bailar, llame a divertirse, llame a olvidar todo y solo dejarse llevar. Al abrir los ojos pude ver lo que habia hecho...

Observe como aquellas dos chicas bailaban de forma sexy y cautivadora para todos los que nos encontrábamos en el lugar, de pronto una fuerza extraña me impulsaba acercarme y divertirme junto con ellas.
Bebí lo ultimo que quedaba de mi trago y camine hacia la improvisada pista de baile, y al parecer no era el único que había decidido hacerlo ya que todos los que nos encontrábamos simplemente observando ahora nos movíamos al ritmo de la música, la diversión estaba por todos lados, bailábamos y reíamos, como ya lo habia supuesto, la fiesta seria estupenda e iba para largo la diversion

La fiesta no esta nada mal y el hambiente esta cada vez mejor, un par de chicas se ponen a bailar, sobrio, lindo espectáculo, una de ellas me hipnotiza, sus movimientos perfectos, sensuales, son una perfecta combinación.
No se por que, pero tengo la nesesidad de bailar, y lo hago, me dejo llevar.

Pero aun así no la dejo de observar, ese vestido verde la hace mas exquisita, y lo mas raro, nadie baila con ella.

Pienso acercarme, cuando sea el momento indicado, mietras sigo bailando y tomando.

Cansada de estar pegada a tantos hombres me acerco y tiro un par de vasos que estaban en la barra, y me subí a bailar en ella, sabía que no sería la única, AsI que aproveche mientras lo hacia sola.

Cada movimiento era bien calculado, no quería parecer una zorra, eso estaba claro.


-Surf, "fuera ropa" Sr bikini- mi debilidad, me encantaba, veía como los chicos bailaban, sonreía y luego alce mis brazos, cerre los ojos y segui bailando...

La fiesta había iniciado y todos bailaban por lo que yo no estaba dispuesta a quedarme atrás camine a la pista y comencé a bailar, a moverme al compas de la música la música propiciaba a bailar de forma sexy y provocativa y de esa manera comencé a moverme era como estar en vuelta en el hechizo de la música para continuar bailando.

Vi a mi compañera subir a la barra y comenzar a bailar, comencé a reír de forma divertida al ver en que se había transformado las tres escobas, en un digno lugar para la diversión joven, seguí bailando entre los chicos que se animaron a entrar y divertirse junto a nosotras

Sonreí al ver a un chico bastante apuesto bailando conmigo, y siguiendole el paso lo hice, total, ese era el chiste de la fiesta... tener nuevos... amigos...

Al parecer las tres escobas renacen...

Le sonreí al chico mientras bailábamos - Gracias, Aricia, también te mueves bien... -- Miraba a mi al rededor, esto si se estaba volviendo un buen lugar, algo raro, sobre todo para el ambiente al que están acostumbrados los magos de aquí, pero bueno, por primera vez me divertía de verdad.