Noche de luna llena /libre/

Como todos los meses, me dirigi al bosque para transformarme, habia tomado la pocion, por lo que no habia peligro, apenas iba por un pasillo de Hogwarts, cuando senti que cambiaba, cai al suelo y sufri alli la dolorosa mutacion. Debia darme prisa en llegar al bosque antes de toparme con algun alumno.

Estaba en el bosque esta noche estaba semi-transformado me veía como una persona con pelo en todas partes con dientes enormes y unas garras salidas de mis manos.
Solamente esperaba sentado en un árbol perder el juicio y empezar a destruir las cosas.

Por fin... Ya me sentía mucho más libre, ahora si que me podía ir tranquilo, ya estaba en los jardines muy cerca del bosque. Olfateé el ambiente mientras entraba, olía extraño, como a... Yo, pero mucho más débil... Me traía mucha curiosidad, y dado que podía controlar mi mente por haber tomado la poción, me adentré tranquilamente en el bosque raspando arboles con mis afiladas garras.

Salte de un arbol al ver una silueta moverse olfatie y o era un animago transformado en lobo o otro hombre-lobo en cualquiera de los dos casos me entenderia asi que decidi ir a molestarlo un rato segun el humor que este.
Salte del árbol y camine hasta el lugar donde surgia el olor. -Hola cara de perro..- Dije viendo a un licantropo cortando arboles.

Esa voz... Me firé rápidamente, sabía que estaba ahí desde que había llegado, pero no me había molestado en buscarlo, el olor sin duda lo delataba... Ted. Habría dicho algo, pero solo podría gruñir y aullar, era un problema, pero me acerqué para poder verlo detenidamente, sin duda, sus faciones habían cambiado, pero no parecía está transformado por completo. me resultaba muy raro ver un semi-licantropo.

-Que te parece tan raro?- Dije sonriendo haciendo mostrar unos colmillos. -Eres Dave o algun otro cara de perro por aqui?- Dije con curiosidad si me habia entendido solo faltaba esperar que aprenda a hablar para poder comunicarnos mejor eso o esperar a perder el control, simplemente quedaba esperar.

Sin duda era Ted, pero no sabía como responderle, no podía utilizar las cuerdas vocales humanas, por que ya no estaban, pero... Sí, quizás eso si que funcionaría dado qeu controlaba mi cuerpo como en la forma humana. Me acerque a suelo arenodo y con una de mis mortiferas garras escribí en la tieera blanda " Sí, soy Dave". Al menos ya tenía un modo de comunicación hasta que consiguiese uno más rápido.

-O pense que habia otro cara de perro, bueno no creo que nos entendamos asi- Dije moviendo mi mano como si fuera una varita y transformándome en lobo, luego de hacer esto quede viendo la luna y luego a Dave. -Mejor cierto?-

Oí perfectamente los gruñidos de lobo realizados por Ted, en su nueva forma, era muys extraño, pero era genial poder comunicarse así.
- "Sí, mucho me jor así"-contesté como creía que debía hacerlo.
Me di la vuelta, olfateé el ambiente... Esto no era bueno, nada bueno... Olía a ave, cierot ave demoníaco que odiaba tanto, arpías.

Olfatie al ver que algo se hacercaba y mis dientes se pusieron hambrientos. -Merienda a la casa...- Dije erizando mis pelos y volviendome un poco mas grande raramente debio ser la luna. -Tienes hambre o no te gustan las arpias?-

Aquella noche me escapé de la habitación. Sabía que era luna llena y que sería peligroso ir al bosque (no es que me desviviera por pasear a las tantas por un lugar prohibido) pero sabía que Dave iba a estar rondando por ahí al darme cuenta de que Rayth vino a visitarme para que me despertara. Dejé que se quedara en mi habitación junto a Argot en el armario, no fuera a ser que lo descubriera algún profesor o prefecto.
Me abrigué y vestí rápidamente con parte del uniforme y un abrigo largo y verde y, sin hacer ruido, zigzagueé por los pasillos del castillo, sabiendo los recorridos de guardias. Esperé unos segundos antes de salir de la escuela y corrí jardines abajo, siguiendo rastros de zarpas en la tierra.
Me detuve.
No sólo había un tipo de zarpa, otras más pequeñas, parecidas a un pie humano, iban más o menos por el mismo camino.
- No puede ser Dave, la transformación ya esta en su punto a partir de aquí.. - murmuré, rozando las huellas del suelo. Me descalcé y seguí los rastros de zarpas en los árboles.
Qué evidente eres, Dave, pensé, sonriendo. Llegué a un pequeño claro donde encontré a dos figuras gruñiendo y me escondí , por instinto, tras un árbol. Sabía que podrían detectarme aun sin hacer ruido por mi perfume. Me quité la bufanda que llevaba más impregnada de mi olor y la lancé a un lado. No sabía si había llegado tarde a la transformación o si aún conservaban sus mentes.
Tapé mi cuello con las manos por el frío y me obliqué a respirar en silencio.

-Realmente lo que me gustan son las salamandras, las probé en un fin de semana, están crujientes, pero dudo que en el bosque hayan, por lo que no diré que no a esas arpías, además, necesito sacarlas de mis terrenos- Contesté con gruñidos.
Olfateé el ambiente, sabía de sobra que alguien estaba por aquí, un humano, sería mejor que no se enterase Ted, pues según me dijo, no podía controlarse, aun que.. quuizás con un licántropo cuerdo a su lado...

-Bueno cara de perro me encantaria ayudarte a cazar arpias y luego quizas comerlas pero Alyss nos esta acompañando- Dije olfatiando el aire pero el perfume que tenia incomodaba si olfato para mi suerte se movio por el aire dejando a el olor de Alyss libre detras del arbol.
Me volvi humano nuevamente, bueno lo que se llamaria humano para mi es denuevo mi forma de medio hombre-lobo. -Alyss a que le tienes miedo si ya conoces al cara de perro y si tienes tu varita podras conmigo si pierdo el control- Le dije volteando mis ojos rojos a su posición.

Oir la voz de Ted hizo que me relajara y a la vez me pusiera en alerta. No llevaba varita, quizá ya me estaba acostumbrando demasiado a no tener que usarla.
Salí lentamente de mi escondite, mirando al licántropo y al evidente medio hombre. Dave tenía todas las características que había leído en los libros, pero Ted aun conservaba sus rasgos humanos, sólo que compartía influencias de la raza en algunas partes de su cuerpo, a parte de tener pelaje espeso en su piel.
Mis ojos los examinaron con cuidado al acercarme. Sabía que no había hecho bien siguiéndolos.
- Haciendo un picnic bajo la luna llena? Qué romántico.. - solté, sonriendo y aferrando mi colgante con una mano cuando estuve a unos metros de ellos.

Me erguí y me acerqué a Alyss para olfatearla, sabía de sobra que era ella, pero ya era la costumbre de hacerlo con todos los humanos, quizás era divertido ponerlos nerviosos.
Ahora que Ted volvía a ser semi humano, no podía contactar con él, aun que en alguna ocasión había recordado que Alyss había oído lo que pensaba, quizás así consiguiese comunicarme con uno de ellos, al menos...
Volví a ergirme sobre mis cuartos traseros y dislumbré la lun entre las hojas, cada vez que la veía me calmaba un poco más, no pude evitar aullar, quizás molestaba un poco a Alyss, dado que siempre fue un sonido de mal agüero. Pero lo hacía por que me sentía bien. La miré desde arriba con mis ojos amarillentos.

-Sin varita?- Dije sacando unos colmillos con impulso pensando en una presa facil, Calma es Alyss no comida y oliste las arpias ellas son comida. Mi voz de la razon me tranquilizo. -Tienes el colgante de plata que te di, eso servirá no dudes en usarlo contra mi- Dije mirándola con una ceja levantada por lo que dijo, seguiré su juego. -Pues nos encantaria que nos acompañaras encargamos comida a domicilio, esta noche son arpias que te parece?-

Miré hacia Ted tras dar un traspié cuando Dave se acercó y aulló delante de mí con bastante volumen. Me gustaba el aullido de los lobos, daba una atmósfera misteriosa en el ambiente.
- Tranquilo, Dave, puedo oirte algo - dije, posando mi mano en su hombro con cuidado. Era suave, pero la quité al poco, girándome hacia Ted.
- En realidad, tu colgante lo llevo enganchado en mi mano - dije, alzando la izquierda hacia él. - Lo que llevo en mi cuello es más importante que una varita, con él no preciso de una - contesté un poco nerviosa por la actitud de mi amigo el medio humano. - No me negaré a recorrer el bosque a las tantas de la noche acompañada de hombres lobo - sonreí, recogiendo la bufanda que había tirado anteriormente.
- La cena de hoy son arpías? Nunca me puse a pensar en que podrían ser comida - reí, como si yo también fuera a participar en el baquete.

Me gire rapido, habia oido el batir de alas que esperaba. Segui el sonido despreocupadamente a un paso ligero, pero sin obligar a mis compañeros a correr.
Por pude dislumbrar a las arpias, comiendo gnomos, sin saber lo que les esperaba.
Me escondi en los arbustos preparandome para un ataque sorpresa.

-Pues si tenies el hambre de un hombre-lobo tu.... AHHHHHHHH!- Grite clavando mis garras a un arbol grande que estaba cerca mio, la transformacion se estaba poniendo mas fuerte volviendo mis piernas y torso mas lobunos que humanos. -Dave ya puedo escucharte- Dije con una voz mas ronca que la comun que tenia y mi pelo y pelaje se cambio de color cafe a uno negro y sigiendolo hacia los arbustos con brillo en mis ojos color entre escarlata y sangre.

Tuve la necesidad de intentar ayudar a Ted cuando comenzó a gritar, pero me obligué a no acercarme, viendo que se había transformado.
Esperé a que avanzaran unos pasos y les seguí en silencio hasta darme cuenta de que ya habían encontrado su primer plato.
Me arrodillé para no estropear la cacería que tenían planeada y observé cómo iban a cazar un par de licántropos. Sólo podía oír la mente de Dave, y no siempre, pero tenía la sensación de que se preparaba para atacar junto con el elemento sorpresa de su lado.
Seguramente era divertido cazar cuando te compenetrabas con otro. Hacerlo solo sería como ir al supermercado, solo que corrías más peligro si cogías una bandeja de carne en lugar de una fruta.

Solo unos segundos mas...YA! Sali raudo al encuentro de las arpias, separando dos del grupo, cuando estuve lo suficiente cerca, las pupilas se afinaron detectando el momento preciso de ataque. Con un movimiento rapido, las lance contra un arbol, aturdiendolas, y convirtiendolas en presa facil.
Me acerque a una de las arpias, acaba con su vida y sacié un poco mi hambre.

Corri detras de Dave corriendo tras las otras dos que rapidamente volaron en picada contra mi, simplemente corri agachado contra ellas y con un salto trate de matarlas rapidamente. -Incendio- Encante mis garras que se empezaron a quemar antes de embestirse contra las arpias causando una pequeña explosión en sus cabezas. -Finite Incantiem- Pare la quemadura en mis garras antes que el dolor en mi piel alcanzara un nivel mas doloroso y parandome en su pecho y comenzando a comer.

Ya había extraído toda la carne posible de esas dos arpías, pero aun tenía hambre, necesitaba una presa más grande, algo que me llenase, lo necesitaba ya, tenía hambre y era capaz de atacar a todo lo que se me pusiera por delante... ¡No! Tranquilo Dave, Recuerda, has tomado la poción, aun estás en tus cabales, contrólate... ¿controlarme? ¡¿Es broma?! ¡Tengo hambre, no es momento de pensar!
Aun habiendo tomado la poción había veces que no podía controlar mi hambre y sed de sangre, necesitaba cazar algo, y pronto o podría perder el control y los efectos de la pócima podrían debilitarse. No podía dejar de pensar lo mismo, matar y comer.
Una presa rápida... Necesito algo grande y con mucha carne, quiero... Comer... Algo
Olfateé los alrededores, tan solo estaban los cuerpos de las arpías y Ted... Y Alyss, una humana.... ¡No, Dave, contróla tu hambre!... Pero es tan... Humana, seguro que es un bocado delicioso... ¡No es comida!
Comencé a correr entre gruñidos clavando mis garras en la tierra con rabia, necesitaba descargar la ira. ¡Merlín que asco! ¿Quién está dejando ese hedor?... Trolls....
en efecto, 4 grandes y tozudos trolls se divertían derribando árboles y viendo como los unicornios y los mestizos negros huían de ellos, era un suicidio, pero era un suicida. Trepé por un árbol clavando mis uñas afiladas en él, y salté a la cabeza de uno, pronto los otros tres intentaron ayudarlo, pero muy tarde, ya le había arrancado la mandíbula inferior y cegado. Pero no fue todo bueno para mi, pues recibí un garrotazo de uno de ellos, y salí despedido cayendo al suelo con un alarido muy propio de los perros o lobos. Me erguí de nuevo, el herido permanecía inmobil sin saber nada de lo que pasaba, perdía sangre sin control, pero uno de sus compañeros había roto otros dos árboles para conseguir armas a sus compañeros. Lo tenía crudo, pero quizás así calmaba un poco mi hambre y rabia.

Salte tras Dave al ver que salio despedido por los aires con el garrotazo y cayo al suelo, no iba a desperdiciar la oportunidad, corri al sentido contrario de donde fue despedido un suicidio claramente para mi garra derecha pero debia intertar hacer que los trolls lucharan entre ellos. -Incendio- Prendi mis garras nuevamente en fuego y prendi en fuego los pantalones y garrotes toscos que tenian los trolls. Bien Teddy no pierdes la astucia de zorro que tienes durante la luna. -Finite..- No, terminalos La voz que escuche no provenia de mi pero tomo control de mi cuerpo e hizo que saltara y clavara mis garras sobre un troll que bailaba tratando de apagar el fuego. -Muere Troll- Dije dando un mordisco en la garganta de este.

Me quedé quieta, observando lo que pasaba en toda la escena.
Sería una locura ir a por Dave, pero estaba herido.. Sin pensar, y aprovechando que Ted distraía a los trolls, comencé a correr hacia mi amigo justo cuando un segundo troll iba a atacarlo para vengar al que había muerto.
- Dave! - grité, parecía que estaba inmóvil.- Everte Statum! - apunté hacia la criatura para que recibiera un golpe, cayendo hacia atrás mientras yo llegaba junto al licántropo.
Miré sus ojos, frente a él, sabiendo que ya no quedaba mucho de su consciencia. Parpadeé y tragué saliva, apuntando a su herida.
- Tranquilo - hice un gesto con la mano en señal de calma, dejando que reconociera mi olor y con la otra, la acerqué a donde fluía la sangre, dejando que la energía de mi colgante fuera dirigida hacia él.
- Vulnera sanctum- susurré, sin poder apartar mis ojos de la sangre que caía de sus dientes. La energía dejó de salir cuando la herida estuvo curada. Di un paso atrás, sabiendo que volvería a unirse junto con Ted para terminar con lo que habían empezado.