El aburrimiento mata a todos por igual...[Gisèlle]

Recuerdo del primer mensaje :

Vale, esto ya era demasiado, no tenía nada que hacer... Mmmm... Por qué no... sí, quizás era bena idea, al fin y al cabo, no tenía nada mejor que hacer, saldría a correr un rato por los jardines. Me quité la túnica y me puse ropa algo más cómoda, pantalones cortos como los de Hogwarts, y una camiseta de manga corta blanca, dejé a Rayth en mi habitación durmiendo y salí bajando las escaleras, la mañana se había despertado hacía pocos minutos... Tenía que dejar de ser tan madrgador, o acabaría por ser un buen chico...

Comencé a correr sin dudarlo por el césped verde y húmedo, era un terreno cómodo, y no me importaba poder resbalar por el rocío, pasaba la mayor parte del tiempo en el suelo...

Ya llevaba como una hora cuando decidí parar a descansar un rato, me senté en el suelo y me revolví el pelo.

Perfecto...

- No... Bueno... Sí... Pero no es el mejor momento para contarlo, sabes?

Y tampoco el mejor lugar ni la mejor persona. Como le digo a un chico al que acabo de conocer y que me ha parecido simpático que a mi primo mayor lo mató un hombre lobo?
Me froté las manos.
"Gis, no es culpa de Dave. Hay muchos licántropos en el mundo. Acuérdate de lo que has estudiado. No se controlan al transformarse. No es culpa suya..." me decía a mi misma.

- Vale, ya está. No pasa nada. Soy estúpida, eso es todo. Olvido con demasiada facilidad lo que he estudiado.

Lo miré a los ojos.

- No se me entiende, ¿verdad? - tomé aire por la nariz -. Cuando era pequeña hubo una especie de... Algo así como un congreso de hombres lobo cerca de donde yo veraneaba con mi familia entera. Era luna llena... Y uno de esos licántropos se cargó a mi primo mayor.

Me encogí de hombros. Acababa de cometer la mayor estupidez de mi vida. Acababa de cagarla con Dave, estaba segurísima.

Genial... Odiaba cuando esto pasaba, me sentía como si fuese un... Un asesino, pero era verdad, era todo un asesino lunar, y no había nada que hacerle si no tomaba la poción... Y no siempre estaba a mano detodos...

- Bueno, lo cierto es que hasta yo odio a un licántropo... Pero no es normal que un licántropo mate un humano... Normalmente, si no ha tomado la poción solo lo hiere o le muerde para conseguir algo de su carne, pero nunca matamos... Ese licántropo debió haber tomado la poción... Lo habría hecho a posta... No hay otro modo... A no ser que fuese alguien como... Fenris Greyback...-Dije arrastrando las sílabas con este último nombre... Lo odiaba a muerte, por su culpa muchos de nosotros éramos tratados como criminales.

La miré a los ojos, parecía un poco defraudada... Seguramente creía que yo pensaba en ella como si fuese una estúpida, o algo parecido por haber dicho eso. Posé mi mano en su hombro y la miré sonriendo.

- ¿Sabes...? Creo que te gustaría visitar a mi abuelo... No para de meterse con su padre... Siempre le gasta bromas como si fuese un niño. Una vez le puso una chincheta en la silla, sí, habría parecido una tontería, pero esa chincheta se le metió dentró de una nalga, y aun no han podido sacarla de ahí... Mi abuelo es un gran mago...-Dije sonriendole.

Agradecí enormemente el cambio de tema que hizo, no sin antes reflexionar sobre lo que me había dicho.
No pude evitar el reír por su comentario.

- Sí, algun dia me tienes que presentar a tu família... Seguro que lo paso bien con tu bisabuelo... ¡Podríamos conspirar contra ti! - bromée.

Reí divertido, la verdad, era un chica muy interesante, últimamente concía a gente genial... La miré a los ojos sonrioendo, al pensar que malévolos planes podrían crear mi bisabuelo y ella, seguramente me pondrían entre un montón de chocolate blanco y otro de grajeas azules....¡Oh! Genial, las llevasba en el bolsillo, saqué la bolsita que solía llevar, siempre me comproaba unas cuantascuando salía a Hogsmeade. Lancé una azul, bueno, en verdad todoas eran azules, y la atrapaé en el aire con la boca, arándanos helados... Adoraba ese sabor para tal dulce.

- ¿Quieres?.- Dije ofreciéndole grajeas azules.

La verdad, sabía de sobra que acabaríamos siendo amigos, me costaba algo tener amigos, no solía estar con gente... Era hora de hacerse más sociable, al fin y al cabo, solo se vive una vez...

- Pues por mi puedes venir a Escocia cuando quieras... Serás bien recibida.- Dije sonriendo.

- ¡Gracias! - exclamé, y cogí una gragea.

Me la metí en la boca. Me dijo lo de Escocia, y sonreí. Entonces me acordé de Andy.

- ¿Sabes que? Tengo un primo de Escocia. Es de Aberdeen. No lo he visto nunca, de hecho, pero hemos hablado por carta. Creo que vendrá a estudiar a Hogwarts, pero no se cuando...

Le sonreí, mientras saboreaba la gragea. Me caía bien Dave, esperaba que fuesemos amigos.

- Bueno, entonces vivimos relativamente cercar.- Dije refiriéndome a su primo de Escocia.- Mi familia vive en Glasgow... Pero sinceramente me gusta más el norte de Escocia, hay más montañas y hace más frío...

Reí un poco y cogí otra grajea, pero no pude hacer nada más que tragarla cuando algo se avalanzó sobre mi, algo naranja y negro, y llamado Rayth...Últimamente se escapaba mucho de mi habitación... Tendría que registrarla, seguramente habría algún agujero, o algo por donde había conseguido salir tantas veces. Lo cogí con ambas manos, a pesar de ser una cría de tigre, era bastante fuerte y ágil. Lo miré fíjamete a los ojos mientras me devolvía la mirada divertido, luego miró a Gisèlle, le pareció interesante, sino no se habría atrevido a acercarse.

- Bueno, supongo que ya que está aquí, debo presentártelo... Éste, este Rayth, mi cría de tigre, la compré hace menos de un mes.- Dije sonriendo.

Di un respingo al ver esa cosa que saltaba encmia de Dave.
Dave me presentó al tigre del que me había hablado antes.

- ¿Con que tu eres Rayth, eh, pequeñín? - dije, mirando tiernamente al tigre.

El animalito me observaba, curioso. A mi no se me daban nada mal los animales, pero quizás con un tigre era diferente... Puse una mano en el suelo, y el animal la olfateó con interés. Con la otra mano le acaricié la cabecita, justo detrás de las orejas.

- Me estoy enamorando de Rayth, Dave. Es una monada... ¿Le gustan los otros animales?

Sonreí al ver que Rayth aceptaba las caricias y se acercaba más a ella.

- Parece que le has caido bien.- Dije sonriendo. La verdad, no sabíam muy bien por qué, pero ya sabía que se llevarían bastante bien.- Bueno, la verdad es que por ahora solo se ha visto con un gato... Pero supongo que con los demás no se llevará mal, estuvo jugando y durmiendo con el felino... Supongo que si onoce aotros, acabará por aceptarlos.

Rayth se revolvió un poco entre sus manos y saltó a su regazo... Para él, no había nada como que lo acariciasen mientras descansaba en el regazo de alguien, pero no contaba con que la última vez que lo hizo, era un gato, y ya no sabía muy bien como debía ser su tamaño, cogí la varita y y lo transformé en gato.

- Vas a tener que seguir así durante un tiempo pequeñín.- Dije a Rayth, tras hechizarlo, solo había cambiado en la forma, el aspecto era igual, savo por que era más pequeño y tenía rasgos de gato.

- Hmm... Ojalá tuviera un gato para que jugara con Rayth. Pero solo tengo una perrita que está demostrando estar en el mismo estado mental que mi bisabuelo, así que...

Sonreí mientras ponia a Rayth en mi regazo y lo acariciaba. El animalito ronroneó.

- Son tan tiernos... Me encantan.

- Si quieres puedo acompañarte a comprar uno... Están a muy buen precio en Bestie Fideli.- Dije sonriendo.- Así no tendrás por que decidir entre quién está más loco y a quién sacarás a a pasear, si tu perrao tu bisabuelo.-añadí riendo.

Rayth ronroneaba siempre con todas las chicas, pero nunca lo hacía cuando yo lo acariciaba... Seguro que lo hacía a posta.

- No sé como hacéis para que ronronee... Conmigo solo quiere jugar a peleas...- Dije sonriendo.

- Harias eso? Me acompañarías? - dije, sonriendo.

Seguí acariciando a Rayth, que ronroneó de nuevo.

- Necesitan sentir espíritu maternal, por eso ronronea conmigo. De los chicos busca el lado paternal, supongo - le guiñé el ojo y seguí acariciando a Rayth.

- Claro que lo haría, así de paso podría ver si me interesa tener otra mascota...-Dije sonreindo.- Sería interesante tener algún compañero para Rayth. Pero no sabría que animal escoger.

Alcé una ceja ante lo que dijo, vaya... Así que me veía así este pequeñajo eh... Mejor, así cuando crezca sabrá quién manda, y no tendré problemas con sus colmillos.

- Supongo que sí.- Dije mirándola.- Parece que sabes mucho sobre animales ¿Qué raza de gato te gustaría tener?

- Pues la verdad, me encantaría tener un Cymic. Son unos gatitos de origen Canadiense muy curiosos. No tienen cola, ¿Sabes?. Es una mutación genética natural.

Lo que acababa de decir habia sonado muy sabelotodo, pero era cierto.

- Son unos gatitos muy monos, el que yo quiero es uno con el vientre blanco y el lomo anaranjado. Son los colores más típicos de los Cymic, supongo.

Spoiler:

Alcé una ceja ante lo que dijo, realmente sabía mucho sobre esos animales. Me gustaba la gente que sabía todo sobre lo que le gustaba... Los llamados Freaks.

- Creo que ya sé cuales son...-Dije materializando el recuerdo en mi nebte.- Sí... Creo que vi alguno en la tienda... No valen muchos galeones, y si te falta dinero, puedo dejártelo.. Se me cae de los bolsillos.- Dije riendo.

Rayth se estiró un momento y saltó de su regazo acercándose a mi... Parecía que volvía a querer jugar.. Busqué en mis bolsillos, sí... Perfecto. Cogí un hilo del bolsillo, tendría que llear el pantalon a coser de nuevo... Ya lo había dehilado tantas veces... Puse delantede Rayth el hilo, hasta que sintió curiosidad por él, e intentó cogerlo, siempre se le escapaba de las zarpas.

Mire como Rayth jugaba con el hilo. Sonreí y le dije a Dave:

- Si tengo algun problema, no será el dinero, créeme...

Era cierto. A los Possesseur igual les faltaba cordura o respeto hacia la gente que llamaban "inferior", pero dinero no. De hecho, éramos una de las familias más ricas de Francia.

- Cada vez tengo más ganas de ir a buscar a mi Irati... Quiero que el gatito se llame Irati. Le pegará el nombre, espero. A mi me encanta.

Irati... Quiero tenerte ya mismo.

Sonreí cuanod lo nombró.. Seguramente le gustaría ese nombre, sí, y quizás fuesen amigos él y Rayth.

- Espero que Rayth y tu futuro acompañante sean buenos amigos...- Dije sonriendo mientras cogía al gato con una mano y lo subía a mi hombro. Le encantaba mantener el equilibrio ahí, aun que a veces le costaba bajar, no por miedo, si no por que no quería.

La miré con curiosidad... Hmmmm... La verdad, no le vendría nada mal tener una mascota... Por lo que me había dichjo solía salir a hacer ejercicio por las mañanas.

- Supongo que traerás a tu gato a Hogwarts,y lo sacarás todas las mañanas contigo...- Dije sonriendo. Rayht se había acomodado en mi hmbro y buscaba la manera más divertida de bajar.

Sonreí abiertamente.

- Por supuestísimo que si. Irati vendrá todas las mañanas conmigo a hacer ejercicio, ¡va a ser el gatito con las patas más fuertes de todo Hogwarts! - bromeé -. No, ahora enserio. Le voy a sacar por las mañanas cuando lo tenga, está claro.

Cerré los ojos y ya me imaginé corriendo con un gatito de lomo anaranjado llamado Irati corriendo detrás de mi, ronroneando cuando lo acariciase y jugando con Rayth...

Rayth bajó de mi hombro y se dficó a mordisquear mis dedos, no me hacia mucho daño por lo que dejé que siguiera.
- Entonces nos veros los cuatro má de una vez- Dije retirando mi mano Rayth me había hecho un pequeño corte.
Parecía desear realmente un gato de esa raza, seguramente ya lo quería desde tiempo atrás.

- Eso espero, será divertido.

Vi como apartaba la mano de Rayth, y pude ver un pequeño corte en su mano. Sin pensarlo tomé al animal en brazos.

- Sabes, Rayth? Tendrías que querer más a tu padre. Él es débil, es un humano cualquiera, tu eres un suertigre muy fuerte. Lo que a ti te parece un juego a el puede dolerle, ¿Entiendes?.

El pequeño Rayth me miraba a los ojos mientras ya hablaba. Le acaricié la cabeza y le dejé en el suelo de nuevo. El se fue hacia Dave, y restregando su cabecita contra las piernas del chico ronroneó.
Yo le sonreí a Dave.

Alcé la ceja ante la reprimenda de Gis hacia Rayth... Pero me sorprendió más que luego me viniese con caricias.

- Eso eso... Ahora me ronroneas no?... Ya te morderé yo.- Dije riendo.- ¿Cuando tienes planeado ir a Bestie Fifeli?

Acaricié a Rayth, la verdad no me había hecho daño, ni siquiera sangraba, pero aun así, Rayth parecía asustadso por haberme hecho daño. Busque en mi bolsillo, no estaba, seguramente lo había dejado arriba.

- Accio cecina.- Dije alzando la varita, siempre la llevaba atada al antebrazo.

Pronto, apareció una blosita de cuero, saqué de dentro un poco de cecina y se lo di a Rayth, adoraba esa carne.

Sonreí al ver com Rayth se deleitaba saboreando la cecina que le daba Dave.

- Bueno... Me gustaria ir cuanto antes...

Miré el reloj. Era temprano.

- Podria ir ahora... Te apetece acompañarme?

- Claro... Por mi podemos ir cuando quieras.-Dije levantándome.

Guardé la bolsa de cuero y Rayth me miró como pidiendo más... No le daría nada hasta que volviésemos, además, ya había desayunado, no podía cebarlo.

- ¿Quieres que venga alguien más? Quizás tendgas algun amigo que quiera venirse.- Dije mirándola.