Tomando el tren sin rumbo (Libre)

Habia tomado mis pertenencias y estaba dispuesta a alejarme para siempre de ahí. Comenzar una nueva vida y no pensar mas. Me subi al tren esperando no tener contratiempos.
Me lamentaba por ser tan tonta, por haber creído que iba a ser feliz con él. Obviamente eso no iba a suceder. Nunca había sido sincero, ni me había dicho el motivo de su comportamiento. No sabía nada, ni sus pensamientos, ni sus secretos. Y ahora estaba esperando un hijo...

-No te preocupes... yo te protegeré siempre.- le dije a mi levemente abultado vientre mientras lo acariciaba.

Había recibido una lechuza de casa avisándome que mi abuelo estaba delicado de salud, así que con un permiso especial, salí del Colegio y abordé el tren en Hogsmeade. Al ir buscando un camarote disponible, me encontré con mi prima. -¿Perse?- le pregunté con alegría. -¿Dónde has estado? Te hemos buscado tanto...- me acerqué a ella y la abracé efusivamente.

-¡Kim!- Exclamé al verla y le respondí el abrazo. -Y..yo no quería que me vieran así.- mi familia se había quedado con la idea de que me casaría y eso definitivamente no sucedería. -¿A dónde vas? ¿No deberías estar en clases?- recordé de pronto al darme cuenta de que no era época de vacaciones.

-Voy a visitar al abuelo, no ha estado bien de salud.- le dije con una mirada triste. -¿Porqué no vas conmigo? Le dará mucho gusto saber que estás bien, se puso mal desde que te fuiste.- no quería culparla, pero todos estaban preocupados por su desaparición y eso hacía que la familia estuviera destrozada.

-¿El abuelo enfermó?- no pude dejar de sentirme mal por ello. Había hecho una tontería tras otra y las personas a las que más amaba estaban saliendo perjudicadas por ello. Tenía que decirle lo que me pasaba. -Kimberly, Jordan y yo ya no estamos juntos... empecé a salir con Ethan Demacci... y...- no sabía como decirle. -bueno, no saliamos, solo estuve con él desde que me expulsaron de Hogwarts y estoy embarazada.- le dije por fin y me puse a llorar.

-¿Y dónde está él ahora?- le dije abrazándola. Me partía el corazón verla así, por lo que le di unas palmaditas en la espalda para consolarla. -¿Siguen juntos?- pregunté sabiendo de antemano la respuesta.

Negué con la cabeza. -N...no, no sé donde está... y no quiero saberlo.- estaba muy dolida por lo que había pasado con él. -Voy a criar a mi bebé sin ayuda de nadie.- mi orgullo era lo único que me quedaba.

-Sabes muy bien que no estás sola. Nosotros, tu familia nunca te vamos a dejar. Te has alejado de nosotros por no sé cual razón, pero entiende que te queremos Perse.- nunca había tenido oportunidad de decírselo. -Siempre vamos a ser familia.-

-¿Qué van a decir cuando me vean? Mi mamá ya me lo había advertido y yo caí... ¿que dirá mi bebé cuando crezca y sepa las tonterías que ha hecho su madre.- necesitaba desahogarme y Kim parecía dispuesta a escucharme.

-Perse, tu hijo estará orgulloso de tenerte como madre, serás excelente, nunca lo dudes.- le dije sin dejar de abrazarla, estaba temblando, probablemente de miedo. -Tranquila, que le hará daño al bebé. De ahora en adelante, tienes que estar bien por los dos.- siempre la había visto como una chica fuerte, pero ahora me daba cuenta de que era una mascara para ocultar su vulnerabilidad. -Gracias Perse, por confiar en mí.- sonreí levemente.

-Gracias a ti, por aparecer cuando más lo necesitaba.- le dije acomodando mi cabeza en su hombro.

-Recuestate, te hará bien. Prometo despertarte cuando lleguemos a Londres.- le ofrecí recargar su cabeza en mi regazo para que se durmiera. Seguramente le haría bien un descanso. -Aquí voy a estar prima, no te dejaré.-

Acepté su propuesta y me fui quedando dormida hasta que comencé a soñar...

Después de un rato desperté y Kim no estaba. Pensé que habría ido al servicio. Me levanté y comencé a caminar por los pasillos. Había algunos alumnos de Hogwarts que debían estar viajando por asuntos personales. Me miraron extrañados. Debía ser por las historias que se contaban de mi, que había sido expulsada y seguramente se habían enterado que salía con el profesor Demacci.

Esperé con cautela a que llegara el tren. Había algunos alumnos de Hogwarts. Vaya, parece que yo no era la única que iba a ir de Hogwarts por un fin de semana. De repente vi a una mujer pasear de un lado a otro de la estación. Creía haberla visto antes. Podría ser...voy a ir a preguntárselo
-Disculpe...me he fijado que lleva un tiempo dando vueltas por aquí. Perdone si le molesta que le pregunte, pero, ¿podría ser usted Persephone Avery? -dije con una voz tímida que salió de mi. Realmente espero que no me tome por una cotilla, simplemente, era curiosa.

-Soy Persephone Avery.- le dije a la chica que reconocí como Hermione Granger, la amiga de Potter. -¿Eres Hermione? ¿No es así?- le pregunté después.

-Si, alguna vez charlamos cuando... estaba en el colegio.- dije ruborizandome un poco por lo incomodo del recuerdo.