Táctica &' Estrategia ~ {Original}

por Tamara Baxter Miér Jun 01, 2011 9:32 pm

Nicholas y su prima, en una historia que busca la paz y la unión de éstos chicos. Destruyendo a quién menos pensaba, el chico se da cuenta del error más grande que pudo cometer.- Termina asesinando al amor de su vida... por una venganza que quería ejecutar contra alguien de su familia, alguien que no lo soportaba. Se arrepiente tanto de lo que hizo... {Historia narrada a través de los ojos de la chica, Ariana}

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En el triste jardín, vigilado por tantas ventanas prontas a abrirse para indicarle que no hiciera ésto o aquello, o recordarle que era la hora de ingerir un remedio, se encontraba mi primo Nicholas, como siempre en su silla de ruedas, y luchando contra una enfermedad que casi le podría costar la vida, dando un paseo muy cerca de mí. Su carácter no era el mismo desde hace unos años atrás, cuando mi tía murió en un terrible accidente, y mi tío lo único que quiere es deshacerse de él. Por éso vive en casa, aunque mi padre siempre le tiene que dar órdenes. Que yo no soportaba siempre, claro está. Siempre lo defendí, lo guardé de todo mal.

Mis padres, (ambos, también mi madre) hartos de ésta situación, me mantuvieron encerrada en la casa, en mi cuarto, advirtiéndome que no me juntara con mi primo, al menos por un tiempo, que estaba demente y hace tiempo lo estaba. Pero que nadie se había dado cuenta, decían. Enfurecí, porque Nicholas era una persona a quién yo adoraba. Nunca tuve hermanos, y fue lo más parecido a uno que pude lograr tener en mi vida. Que lo insultaran a su manera, me parecía muy mal.-

Un día, un hombre vino a ver a mi primo. No supe nunca quién era, supuse que era un doctor. Lo revisó durante muchas horas. Así como llegó se fue y yo me pregunté qué habría pasado en su corta visita. Hasta que por fín me dejaron verlo, pasó prácticamente más de una semana. No le había visto en los últimos diez días y me aterró la espantosa alteración que se había producido en tan breve intervalo. Nicholas no era el mismo que solía ser. Se había puesto peor, estaba débil, enfermo y casi era una sombra de lo que había sido algún día. Lloré, aterrada de que algo le pudiera ocurrir, pero fue peor aún mi miedo cuando le escuché hablar en una lengua desconocida, para mí al menos lo era.

-¿Qué estás diciendo, primo? -pregunté, intentando mostrarme valiente. No creo que haya resultado. -

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Nada. No dijo nada más, hasta que de repente se levantó, y como si fuera otra persona, empezó a hablarme. En ésa misma lengua que yo desconocí antes. Parecía otra persona. Hacía las cosas contra su voluntad. Yo estaba sola en mi casa en ése momento, por lo que nadie podía ayudarme a controlarlo y a tranquilizarlo. Quería matarme... simplemente se le cruzó ésa idea por la cabeza. A como diera lugar, tenía que acabar conmigo. Parecía poseído, o algo por el estilo:

-Tengo que acabar contigo -repetía mi "hipnotizado" primo. -

-No, por favor, no sabes lo que dices.... no... -le decía, tratando de calmarlo. Fue inútil.-

-Es tu final, no tienes escapatoria...

Hubo un momento en que llegué a correr queriendo escapar de él. Salí afuera, al jardín, y empecé a correr para poder escapar de los delirios de Nicholas. Aún sabiendo que era imposible hacerlo y que mi primo me podría encontrar en cualquier momento. Que la persona que yo más quería, de repente iba a cometer un crimen. Y sin ni siquiera saberlo, parecía víctima de un trance. El hombre que había visto le había hecho ésto, yo estaba convencida.

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Había corrido hasta una plaza cercana, me oculté entre unos árboles. Justo a tiempo llegó otro de mis primos, para ayudarme a tranquilizarlo, pero el tono de su voz cambió de nuevo; había adquirido un matiz más suave, como de una desesperanzada resignación. Sin embargo, permanecía en él una tensa ansiedad por mí. Y entonces supe que algo malo estaba pasando. No era normal aquel comportamiento. Era realmente aterrador, y quizás, hasta trágico si nadie sabía lo que iba a hacer mi primo al siguiente segundo. Podría volver a la normalidad o tal vez cumplir con su objetivo: Terminar con mi vida.

Volvió definitivamente a la normalidad. Sólo fue un segundo en el que temí que me matara...

-Sólo intenté ayudarla a arreglar el jardín... luego no sé qué fue lo que pasó, no recuerdo nada. -explicó Nicholas, cuando todos le preguntaron por qué estaba yo tan asustada.-

Mi padre miró a su sobrino con desconcierto, y utilizó el sarcasmo para una parte de lo que iba a decir a continuación:

-Córtala en dos si así la prefieres -dijo-. He tratado de salvarla de la destrucción.

-Pero él no tiene la culpa de nada -lo defendí de nuevo ante mi padre, no me importaba nada. -

-¡Mentira! Ha hecho que te asustaras de ésta manera... es una amenaza...

-No es ninguna amenaza -me molesté rápidamente. No permitiría que dijeran éso de mi primo. Propuse: - ¿Qué tal si Nicholas se queda conmigo? Peligroso o no, es mi primo y me encargaré de cuidarlo yo misma. Es un buen trato, si algo me pasara sería mi culpa.[

-¡No me importa! Ahora ya sabes por qué odié siempre a tus tíos.

-"Rechazó ésta justa oferta, y entonces advertí que todo sería mejor y más satisfactorio si él estuviera muerto." -es como si hubiera podido leer la mente de mi primo. Supongo que hasta lo hice en verdad. Susurré un "no lo hagas" , y creo que fue en vano.-[/size]

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Y la verdad fue la siguiente, mi amado padre fue a la sala de música que yo solía frecuentar. De él había heredado mi talento con los instrumentos musicales. Era muy buena persona, más allá de su pésimo carácter, y de mil maneras expresaría más que con palabras su cariño hacia mí. Al ser su única hija, era su mayor tesoro en la vida. Me lo dijo. Tuve el honor de escucharlo. En ésa ocasión sonreí encantada. Todavía lo pienso y sonrío.[

]Fue mientras pensé en ésto que pasé por ésa sala, y atrás de mi padre estaba Nicholas.[/

Sostenía un hacha y estaba a punto de clavársela en el cuello, otra vez en estado de trance.

-¡No! -grité, de nuevo aterrada, corrí hasta mi padre, y hasta mi primo para evitar que lo matara. Era obvio que todavía no había recibido ningún golpe vital.

No me hizo caso.

Bajó el hacha, pero en vez de darle a mi padre.... me dió a mí.... de repente ví borroso todo. Caí al suelo. Pálida, fría, y quizás mi cuello sangraría, no lo sé. Logró su cometido.[

Mi padre sufrió muchísimo cuando vió lo que hice por él, supo que éso de verdad era el amor que yo le tenía. Casi le da un ataque, por lo que ví como una fantasma, en lo que me convertí. Se sentó, mirando fijamente por la ventana; tomó la mano de su mujer, la apretó en la suya, como en sus tiempos de enamorados. Mi madre nada más pudo llorar y abrazarme, aunque estuviera tirada en el suelo de piedra Cuando Nicholas mismo vió lo que hizo conmigo se arrepintió mucho de haber cometido un error así. No sé, pero yo desde el cielo veo todo ahora. Hasta el amor que mi primo sentía por mí...

Pero nunca voy a volver a abrir mis ojos, es hora ya de aceptarlo.

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" Mi táctica es mirarte, aprender como sos, quererte como sos

mi táctica es

hablarte y escucharte

construir con palabras

un puente indestructible.

Mi táctica es

quedarme en tu recuerdo

No sé cómo ni sé

Con qué pretexto

Pero quedarme con vos "

--- > El fragmento que puse al final es de un poema se llama "Táctica y Estrategia". - Mario Benedetti. Me gustó porque me recuerda a la historia. Espero y les guste mucho...

Tami