estresada (Caradryan Blodmir)

estaba en el lago observando al calamar cuando de repente recorde que tenia deberes pendienes, ¿!como podia haberlo olvidado!? Tome mi mochila y me fui corriendo a la biblioteca. Antes de esntrar me detuve un poco para recuperar mi respiracionnormal, cuando entre estaba completamente sola, salvo por un chico, un Griffindor segun parecia, nunca habia tratado con uno de su casa pero sabia que habia un conflicto ancestral entre nuestras casas,asi que decidi no hablarle me dirigi a un estante buscando un libro y vi que el espacio estaba vacio *rayos* pense, regrese a las mesas y de reojo vi que el tenia el libro que yo necesitaba, asi que me sente, puse los codos sobre la mesa y coloque mi cabeza entre mis manos...

Había ido a la biblioteca ese día para entretenerme leyendo un rato allí. Había dejado a Lorner con Penélope, ya que de todas formas yo era su cuidador, asi que me dedicaba a leer un libro interesante de magia bastante avanzada para mi, pero no me importaba leerlo.

Entonces una chica se sentó, con la cabeza apoyada entre sus manos y sin querer activé mis ojos, que procuré taparlos con el libro y miré de reojo. Ella andaba bastante estresada por algo, aunque los ojos no me decían el motivo. Logré apagarlos y decidí preguntarle que era lo que le preocupaba.

- Oye, ¿necesitas este libro acaso? Yo solo lo estoy leyendo por placer, asi que puedo leerlo en otro momento. - Dije mientras cerraba el libro y lo dejaba sobre la mesa.

Si alguien necesitaba el libro, mi deber era darselo, ya que lo mío era por entretenerme.

Escuche su comentario, para lo que habia oido en mi sala comun ese chico era muy amable - muchas gracias - dije soltando un soplido de alivio, habia salvado mi vida al prestarme en libro

Y dime que hace una persona como tu leyendo un libro tan avanzado como este - dije en voz baja, no queria que la bibliotecaria nos hechara por hacer ruido - aun te faltan algunos años para este tipo de magia ¿no crees? - dije sacando mis cosas de la mochila

Por cierto soy Alexa Kendrik, un placer conocerte - dije sonriendole y ofreciendo mi mano para que la estrechara

Oye una duda, ¿se puede comer aqui? - esperaba un no de respuesta pero no perdia nada con preguntarle, al fin y al cabo no pasaria de que me dijera que no y ya...

La chica pareció muy aliviada al ver que le dejaba el libro, ya que dió un suspiro enorme mientras me daba las gracias. Entonces me preguntó que por qué leía un libro como ese, ya que era de magia muy avanzada para mi curso. Acto seguido se presentó como Alexa Kendrik y me tendió la mano, que estreché. Después me preguntó si se podía comer aqui. Decidí responderle mientras pensaba en que libro iria a leer; quizas algo sobre dragones.

- Me llamo Caradryan Blodmir, no se puede comer y leia ese libro por entretenimiento. Si me disculpas, ahora vuelvo. - Dije en voz baja mientras iba a la sección de Dragones y cogía un libro sobre los dragones de raza Galés Verde. Una vez lo cogí, me volví a donde estaba Alexa y me senté para empezar a leer ese libro.

Un placer Caradryan - le dije - y es una verdadera lastima, las trufas que me envio mi madre tienen muy buen aspecto - dije mirandolas dentro de mi mochila - cuando salgamos te invitare una ¿te parece? - le debia el favor de que me prestara el libro

Por cierto tienes muy buenos gustos en magia - le dije ya que el libro era de transformaciones, que, obviamente, era mi fuerte la transformacion para mi era facil la practica pero la idea de la teoria nunca me habia gustado mucho.

Vi que se perdio tras su libro asi que me encogi de hombros y lo deje que leyera a gusto mientras mi pluma escribia rapidamente, queria terminar cuanto antes los deberes.

Al parecer preguntaba por si quería unas trufas hechas por su madre. No lo mostré gracias a que estaba con el libro delante, pero se me hizo la boca agua. Nunca había probado unas trufas, asi que estaba verdaderamente interesado en como sabrian.

Acto seguido me dijo que tenía un buen gusto para la magia; aunque después se dedicó a hacer su tarea. Yo mientras me dediqué a leer el libro de dragones; aprendiendo a como cuidar uno y sus características, por si acaso volvía a ver a aquella cría de dragon.

- Me gustaría mucho tomar una trufa. - Dije sencillamente sin dejar de leer. Esperaba que ella terminase pronto para poderlo tomar.

Sonrei por lo que dijo - claro estoy a unas lineas de terminar mi tarea y te invitare una - dije sin despegar la pluma del pergamino. La parte teorica era facil como la describia ese libro, y no se parecia a mi libro de consulta en francia que marcaba movimiento por movimiento, paso a paso todo lo que se tenia que hacer y terminabas confundiendo un paso con otro. En menos de 5 minutos termine de escribir todo y cerre el libro felizmente - listo - me levante y deje el libro en el estante que debia estar - bueno salimos o quieres leer un poco mas? - le pregunte ya que leia con mucho interes su libro de dragones, me sente en la orilla de la banca esperando su respuesta mientras ya imaginaba el sabor de las trufas, mi madre tenia un gusto exquisito y solo compabra las mejores de todo Paris...

Al parecer solo estaba terminando, asi que decidí leerme poco más del libro, para después cuando me dijese que si nos iriamos, dejase el libro en su estanteria.

Y ella tenía razon, terminó muy pronto y me preguntó exactamente lo que pensaba. Cerré el libro con cuidado y fui a dejarlo en la estanteria correspondiente. Después me acerqué a Alexis, para decirle en voz baja: Podemos irnos.

Decidi esperar a que ella empezase a moverse, ya que ella era la que me iba a dar la trufa. Mientras esperaba a que se moviese, me empecé a imaginar como seria el sabor de esas trufas. Debían de estar deliciosas.

perfecto - le dije cuando fue a dejar su libro al estante correspondiente, rapidamente guarde mis cosas en la mochila.
tenia ya todo listo y le di la mano para que fuera conmigo, era un niño y se me hacia muy tierno.
nos dirigimos a la salida y le sonreimos a la bibliotecaria y ella hizo lo propio; salimos de la biblioteca y tenia tantas ganas de probarlas que le dije - gustas que nos sentemos aqui afuera y comencemos? - me sente en el lado opuesto de la puerta de la biblioteca y saque de m mochila una cajita que parecia como de porcelana blanca con adornos en rosa, la sola caja era hermosa y eso hacia que mi imaginacion hiciera masdelicioso aun su contenido.
abri la caja con cuidado y deje al descubierto su contenido y lo diriji hacia el - toma - le dije amablemente, en cuanto tomo uno hice lo mismo y me lo lleve a la bocadi una pequeña mordida disfrutando su exquisito sabor - definitivamente son las mejores trufas de todo paris...

Empecé a andar con ella; pero por poco tiempo; ya que encontramos un banco cercano donde nos sentamos. Después ella sacó la caja; que tenía una buena manufactura, y la abrió destapando las trufas. Entonces me indicó que tomase uno, asi que cogi y me lo metí en la boca.

Inmediatamente me dejé llevar por su sabor; no había pensado nunca que estuviesen tan deliciosos. Después de un rato saboreandolos, acabe tragandolo. Entonces ella dijo que definitivamente eran los mejores de todo Paris.

- Concuerdo contigo. Estan deliciosos. - Dije sencillamente mientras me atrevía a coger otra trufa, esperando que no le importase a Alexis.

le sonrei - bueno definitivamente si tienes buenos gustos - dije al ver que la primer trufa que comio la habia disfrutado como solo esas trufas se podian disfrutar el tomo otra y yo le sonrei para que viera que no habia problema
tome la caja y la deje entre los dos para que pudiera tomar cuantas deseara - toma las que gustes, para mi madre no es problema enviarme mas cada que se lo pido segun ella "le hace feliz poder concentir a su hija aun que estemos tan lejos la una de la otra"; por lo general estas tardan en dartelas pero para ella no es problema mover a sus contactos y que se las den en ese momento; es lo unico bueno de tener una madre modelo te reconocen por haber salido junto a ella en una foto y agilizan todo lo que necesites - dije riendo recordando unas cuantas ocaciones en las que me habia pasado eso

No pude evitar sonreir cuando dijo que podia coger mas, pero en cuanto mencionó a su madre mi sonrisa se borró implacablemente de mi cara. Me dediqué a saborear la trufa en silencio mientras pensaba en lo que podría haber sido tener una madre y un padre que me diesen cariño. Era un tema del que no me gustaba hablar demasiado.

Al final terminé tragando la trufa, en silencio, meditando en esas ensoñaciones de tener padre y madre. De todas formas también pensé que sería una lata tener una madre modelo, porque estarían persiguiendola a todas partes para conseguir una exclusiva. Decidí intentar desviar el tema para evitar esos pensamientos sobre familia.

- Bueno, ¿cual es tu asignatura preferida? - Terminé diciendo sin mas, aunque mis ojos destilaban cierta tristeza todavia.

Vi que en sus ojos caía de repente cierta triztesa cuando trate el tema de la familia, asi que decidi no seguir en ese rumbo y no preguntarle por su pasado

Mi materia favorita es transformaciones - le dije sonriendo - tal vez algun dia me veas haciendo alguna transformación y entenderas por que - dije recordando mi peculiar condicion gatuna - bueno dime ¿te gustan los gatos? - le pregunte ya que talvez podria tener alguna alergia o algo asi y no podria enseñarle nunca mi transformacion - tambien me encanta pociones, pero

Y cual es tu materia preferida? - le pregunte mentras ambos tomabamos otra trufa mas

Al parecer su asignatura preferida era Transformaciones, y hasta dijo que alguna vez podria verla transformandose en otra cosa. No activé los Ojos de Dragon de puro milagro, debido a la curiosidad que sentía. También me preguntó si me gustaban los gatos, a lo que decidí contestar mientras cogía otra trufa de la caja.

- Pues también es transformaciones mi asignatura favorita, y me gustan todo tipo de animales, asi que descuida. - Dije con mi habitual seriedad saboreando la trufa. Tendría que cuidar esta amistad, aunque fuese solo por las trufas.