Mazmorra, dulce mazmorra(Libre)

Era de noche, me había retrasado bastante, pero al fin llegué. Debía reconocer que pese a llevar varios años aquí todavía me perdía. Bajé las escaleras y giré, todo esbaba tan vacío como de costumbre, sin embargo la sala común estaba como siempre. Era tan acogedora. Después de decir la contraseña entré. saque mi varita y dejé una nota en mi recordadora. Luego pensaba ir al gran comedor a comer algo, pero no me apetecía moverme del sillón cuando ya estaba tendido en él. Puse mi mano recta y agitando mi varita salió un dulde relleno de chocolate. Escuché unos pasos que venían de fuera así que alcé un poco la vista y era, como no, Snape, vigilando. La noche segíua y tras hacer mis deberes de pociones, que me trían loco, decidí salir a tomar el aire, sí eran las 2 de la noche, pero ¿Y qué?. Dejé la poción en un recipiente de crista en mi chaqueta estaba todo preparado así tranquilamente susurré.- Lumus y salí del cuarto a pasa ligero, tampoco quería arriesgarme a que me pillaran. Mi idea era dirigirme a la lechucería o...quizás al campo de Quiddicht a estrenar mi escoba de mi cumpleaños regalada por mi padres, pero eso ha´ria gran ruido, mejor a la lechucería.

Estaba sentiada en un sillón de la Sala Comun, leyendo el libro que habia tomado prestado en la biblioteca. Llevaba solamente un pijama de color verde y unas chanclas negras. Tenía el pelo recogido en una coleta alta para que no me molestara durante la lectura. Iluminaba mi libro solamente con la tenue luz de la varita.

La novela hablaba de la Guerra de Troya. Era interesante, y me adentré de immediato en la lectura. Pero luego oí unos pasos y levanté la cabeza

- Nox - murmuré, apagando mi varita.

Solo podia ver la luz de otra varita, pero no supe a quien pertenecia. Me levanté, dejando el libro en la butaca.

- Hola...?

Mientras avanzaba en mi aventura nocturna me percaté de una luz muy floja debido a la distancia a la que me encontraba de ella, no sabía que podía ser asi que seguí avanzando como si nada. De repente se apagó, me quedé algo impactado pues ahora no sabía que podía ser eso, hasta que oí una voz dulce. - Ehhmm..Hola..Perdona pero no te veo, ¿ Dónde estas?.- dije moviendo mi varita alumbrando a todos lados. - Yo soy Matthew, alumno de 6º curso.- dije presentandome, me sentía algo loco, como hablando solo, así que me paré y espere respuestas.

- Lumos

La varita se encendió, ilumniándome. Le sonreí al chico.

- Aqui estoy. Soy Gisèlle, de sexto también. Encantada

Bajé un poco la varita, pues la luz me molestaba un poco.

- ¿Que haces por aqui a estas horas?

Vú como iluminó su su rostro, y al fin lapude ver, era muy guapa y llevaba una cola alta, aunque no sabía para que, no entendía esas cosas. - Encantado Giselle- dije estrechando mi mano. La verdad es que no suelo dormir, prefiero estar tranquilo por las noches pensar, volar, ir a londres y robar algo, coger el aútobus nocturno...¿ Vienes?.- dije simpático, esta noche tenía pinta de ser muy divertida y larga.

Sonreí. Esa noche no tenía nada de sueño, y hacer algo movido me iria bien.

- Me apunto, con muuuucho gusto!

Me deshice la coleta que llevaba, dejando que el pelo me cayera en forma de cascada por la espalda, y le dije a Matthew:

- Y bien, ¿Cual es el plan para hoy?

- Pues para hoy...mmm..si tienes escoba, iremos a Londres volando sino, tendremos que colarnos en un tren..es mas dificl si smos dos, pero creo que podremos. Luego, si no tienes ganas de salir, podemos ir a lechuceria o coger el noctámbulo que tiene literas incluida y nos llevan donde queramos. Así que...elige tú estoy a tu disposición.- dije sonriendo haciendo una reverencia.

Uau! Menudo planazo!

- Oye, por mi lo que sea. Tengo escoba, pero podemos coger otras opciones si te apetece. De todos modos, lo que no hagamos esta noche lo podremos hacer mañana, no?

Me encogí de hombros, dándole a entender que me daba igual donde fueramos.

- Claro.- dije sonriendo.- Venga vente.- dije ofreciendole mi mano y andando hacia las puertas. La abrí con cuidado para no hacer ruido, sin embargo, hizo bastante. Salimos deprisa cuando escuché una voz. - Creo que hay alguien. Y no puedes ser otra persona que Snape, por que a esta hora...- dije algo nerviosono sabía como ibamos a salir de allí, pero mas o menos tenía un plan.

Le cogí la mano con una sonrisa, y me llevó con él. Hizo bastante ruido, y yo apagué la varita al instante.

- No te muevas. Snape nunca llega hasta aquí. Va a dar media vuelta en nada. Mira, ves? Ya se va... - iba susurrando yo.

Saqué la cabeza hacia el pasillo y no vi a nadie.

- No hay magos en la costa - le guiñé un ojo y tiré de él.

Había pasado el "peligro", era mi primer año en Hogwarts, y realmente el profesor Snape era de los peores por que lo que decía la gente. - Uff..menos mal, suelo hacer esto, pero, nunca con riesgo.- dije riendo. -Bueno,pues ¿Vamos a Londres?- dije girando y yendo hacia la escalera para subir. La idea subir y salir por la entrada, ya que Filtch dormía como un tronco todas las noches, se le oía de roncar hasta aquí. Suubí los escalones de dos en dos, estaba entusiasmado. Todo salía como esperaba hasta que de repente la escalera cambio de sentido.

- ¡Vamos! - exclamé, contenta.

Escuché y pude oir los ronquidos de Filch. Ese hombre no entendia que eso de ser guardia consistia en no dormirse durante las noches para hacer guardia.

- ¿Donde quieres ir, de Londres? - pregunté.

- Pues bueno lo primero, has cogido la escoba no?, bien pues sígueme...si puedes...- dije mientras pisaba en el suelo y volaba por el castillo hacia la salida por la puerta principal.

Me reí en voz baja, mientras daba una patada al suelo y le seguía a muy poca distancia por los pasillos.

- Créeme, Matt, te estoy dejando ganar! - exclamé, divertida.

Apreté un poco más, y me puse a su lado.

- Hacia donde me lleva, señor?

- Si si...- dije riendo.- Por ahora a Londres...volando.- dij mirando como se ponía a mi lado.