Esperando compañia [Libre]

Llegó a la sala común despues de haberse pasado la tarde haciendo los deberes en una aula sin utilizar de la escuela. No le agradaba la biblioteca ya que se sentia observado por los demas alumnos y para él hacer los deberes requeria una sola cosa: tranquilidad.
Bostezo y dejo su mochila al lado de uno de los sofas de la sala común, seguidamente se sente y coloco los pies encima de una mesita pequeña que habia delante del sofa, se acomodo con una sonrisa satisfecha y miro a su alrededor y mirando a cualquier rostro que le pudiera parecer lo suficientemente interesante para que se acercara a conversar.

La sala estaba algo llena, el ánimo que se respiraba alli me hizo sonreir. Bajé las escaleras de los dormitorios cuidadosamente y me acerqué a la chimenea.

Muchos chicos conversaban entre si, pero yo traté de no hacerme notar mucho. Me sente en un sofa lejano y abri mi libro de Quidditch favorito.

Senti la mirada de alguien, pero no levante la mirada.

James contemplo como una chica bajaba de las habitaciones de las chicas. Era pelirroja y tenia unos ojos brillantes. James sonrio y se acerco al sofa donde se habia sentado la chica, estaba leyendo un libro. Se sento a su lado comodamente.

- ¿No te importa, verdad, que me siente contigo?- le pregunto con una sonrisa- me estoy aburriendo mucho y me apetece conversar con alguien.

Levante mi mirada del libro al escuchar la voz de un chico.

- Ya estas sentado - dije con una sonrisa. Cerre el libro y me acomode en el sofá. - Soy Dominique, puedes decirme Dom si quieres...

Me sentí comoda con su compañia y ademas yo tambien necesitaba hablar con alguien.

El muchacho sonrio ante el comentario de la chica y se limito a escucharla con atencion.

- Un placer Dom, mi nombre es James Anderson- le dijo él con una sonrisa- ¿en que curso estas? No te he visto en sexto..

El muchacho analizo a la chica quien no parecia ser ni mucho mayor ni mucho menor a él, la habia visto un par de veces por la sala común pero no habian coincidido nunca. Ya habia siendo hora que eso cambiase.

Senti su mirada, más curiosa que nunca. Escuché su nombre y sonreí.

- El placer es mio James - contesté - Pues estudiaré en séptimo y trataré de encontrar trabajo en el callejon Diagon.

Me pasé el cabello detrás de la oreja y suspiré, mientras lo observaba.

Off: Os importa que me una? xD

Leo lovegood llegó a la sala común, aquel lugar donde se reunían todos los compañeros de la casa, aquel lugar en el que se sentía tan solo debido a su automarginación durante los cinco primeros años en la escuela.

Había bastante alboroto en el lugar, y no conocía a nadie de la sala común, Leo fue directo a las escaleras que llevaban a la habitación pero paró a unos metros de las escalera y se fijó en que había apartadas de la muchedumbre dos compañeros sentados en el sofá lo cual le hizo debatirse entre ir a donde se encontraban sus compañeros o volver a la habitación.

Tampoco conocía a esos dos Gryffindors pero Leo tenía la esperanza de que pudiera entablar conversación con ellos pero en vede ir y presentarse se quedo parado, mirándolos.

Pensé que talvez James se senti algo intimidado por mi mirada así que me dediqué a mirar alrededor. Un chico veia hacia nuestra dirección. Tuvimos contacto visual por unos segundos y después desvió la vista.

Le sonreí y le hize señas con las manos para que se acercara, mientras me acomodaba mi uniforme.

James asintio ante los planes de la chica para un futuro, luego se dio cuenta que esta analizaba la sala común y le hacia ceñas a alguien que no se encontraba demasiado alejado de ellos, era un chico al que no sonaba haber visto.

- Acercate hombre- dijo James sonriendo con simpatia al ver que el chico se debatia entre ir o no ir- no nos comeremos a nadie.

- Dominique Delacour - contesté después de unos segundos. Parecía un buen chico y ¡tiene unos ojos azules hermosos!

Le hize un gesto para que se sentara con nosotros, mientras le sonreía a James.

- El placer es mio - le dije educadamente.