Llegando a la Sala Comun (libre)

Regresaba del patio tenia libre el día, para ser verdad era mi primer día en el colegio, y ya estaba ansioso de comenzar mis clases. Me dirigí a la Sala común de Ravenclaw, llegue a la puerta y el águila me realizo un acertijo.

-Si estás participando en una carrera y adelantas al segundo, ¿en qué posición terminarás la carrera?

Me quede pensando en la respuesta, era una pregunta un poco capciosa

-“Si se supone que yo voy en tercer lugar puesto a que me adelanto al segundo, eso significa que ya estoy detrás del primero, así que voy en…”

-Voy en segundo lugar

Dicho mi respuesta la puerta se abre y puedo pasar a la sala común

Escuché el clásico ruido de la enorme puerta de piedra moverse y miré en esa dirección.

Habia estado casi todo el dia sentado en el mismo sofá, leyendo un grueso libro sobre Quidditch. Muchos alumnos habian entrado a la sala pero el rostro que veo ahora, no lo conozco.

Me puse de pie y caminé lentamente hacia él.

- Buenas tardes, soy Louis, bienvenido.

OFF: Me uno
Subí hasta la sala común después de un vuelo, ya había dejado la escoba en los almacenes y solo tenía que subir a cambiarme de ropa, más que por comodidad, por estilismo, la túnica de Ravenclaw era lo más preciado para mi, era el símbolo de lealtad hacia mi casa, la casa de la sabiduría y la inteligencia.

Al llegar por fin a la puerta, se me hizo la siguiente adivinanza:

-"Tengo 8 patas, 7 ojos, y 1 boca, decidme, ¿Dónde me dirijo?"

Lo medité durante unos segundo tenía esas dieciséis cosas pero... ¡Claro nadie podía dirigirse a ningún lugar sin eso!

-No os dirigís a ningún lugar, pues no tenéis rumbo-Contesté sonriendo satisfactoriamente.

-Bien pensado- Dijo de nuevo, abriéndose.

Al entrar vi un par de caras nuevas, no estaría mal hacer alguna amistad, me acerqué a ellos.

-Buenas, soy Dave Wishe, sexto curso.

Estaba en los dormitorios muy aburrida sin hacer nada. Había estado ordenando unas cosas de los nuevos alumnos, de quidditch y demas. Despues de la muerte de Memnock, no volvería nada a ser igual. Suspiré. Guardé todas las hojas en sus respectivas carpetas y las dejé a un lado de la cama. Como no tenía nada que hacer decidí ir a la biblioteca. Al llegar a la sala común, vi a un chico nuevo hablando con Louis. Al instante entró otro chico y se unió a la conversación. Me encogí de hombros y fui en aquella dirección. Tenia que ser una buena prefecta. Me acerqué al grupito.

-Soy Anna, prefecta de la casa.- Dije sonriendo al recien llegado.

Despues miré a Louis y le dediqué una sonrisa en forma de saludo.


Off: Me meto espero no molestar.