Primera clase Transformaciones

Muy ansciosa por la clase de transformaciones me apure para no llegar tarde. Hice caso al anuncio en el pizarron y tome asiento por la parte de atras, ya que todos los llegados estaban dispersos no me quise apegar a alguien, acomode mis cosas y espere a que comenzara

Después de la clase de Encantamientos caminé hacia el aula de Transformaciones, donde me esperaba una profesora igualmente joven. Al parecer habían entrado muchos profesores jóvenes a Hogwarts. Sonreí, ya que de mayor mi deseo era ser profesor en la Escuela de Magia… tampoco me quedaban muchos años para conseguirlo y seguramente sería capaz de conseguirlo siendo igual de joven que aquellos nuevos profesores. Por los pasillos hacía frío, por eso llevaba el abrigo, a un lado colgaba mi cartera llena de libros, plumas y dos tinteros.

Entré en la sala y paseé la mirada, fijándome en la profesora y lo que había escrito en la pizarra.

- Buenos días… – dije sin alzar la voz ya que el silencio era sepulcral.

La profesora había escrito que quería silencio mientras nos sentabamos, pero a diferencia del profesor Crowly no había escrito su nombre en la pizarra. Suspiré, tenía pinta de ser más estricta a pesar de ser más joven, como mucho me debía sacar un par de años. Ya había bastantes pupitres ocupados, pero cerca de mí, en uno de los últimos escritorios pude ver una chica conocida: Cécile. Mi rostro se iluminó con una sonrisa y di unos pasos lentos hasta acercarme al sitio que había a su lado, dejé la mochila en el suelo y me senté sin hacer ruido ni decir nada. Saqué el libro, un pergamino, la pluma y un tintero haciendo el menor ruido posible y luego dirigí una mirada de reojo a la Hufflepuff esperando ver su reacción, sin dirigirle la palabra, solo sonriéndole.

Llegué a la clase algo tarde, aunque me sonreí a mi mismo ligeramente al ver el cartel que la profesora habia colgado en la puerta. Bien, habría que hacer caso. Entré con el menor ruido posible y me acerqué hasta uno de los pupitres libres, en la zona de la derecha. Era una clase bastante concurrida, al parecer, aunque no tenia pinta de haberse empezado aun a dar la materia.

Observé el reloj en mi muñeca mientras iba por el pasillo;en realidad iba tarde a la clase, por lo que no me preocupe tanto en apurar el paso; cual era la diferencia entre llegar 5 o 15 minutos tarde a una clase, después de todo la falta ya estaría hecha. Sonreí con sorna ante mis pensamientos, al tiempo que me encontraba frente a la puerta del aula; fruncí el ceño y puse una expresión de total desesperación mientras abría con sumo cuidado la puerta y me asomaba.

La profesora, una mujer bastante atractiva tenía que admitir, miraba a todos con seriedad; sonreí apenado mientras entraba al salón sin hacer ruido. Me senté en una mesa a la izquierda, casi al fondo, era obvio que mi retraso había sido notado por la mujer. Pero es bien sabido, llegar tarde te da importancia.

Mire de reojo a los alumnos, había de todas las casas (y al parecer de todos los años); cosa que se me hizo extraña... No sabía que en Hogwarts los alumnos tomarán clases mixtas. No dije nada, me limite a escuchar.

Mire como fueron llegando los alumnos, reconoci a varios de ellos, pero como deviamos guardar silencio solo les sonrrei amablemente a Cécile (una chica de mi casa con la que ya habia pintado antes), a Vera, Emmanuel y Jack. Entre ellos llegaron chicos a los que no conocia asi que solo los vi de reojo y volvi mi mirada a la pizarra. Luego la profesora pronuncio unas cuantas palabras, pregunto si habia duda y como yo no tenia nada que decir acenti y voltee a mi cuaderno anotando el nombre de la profesora para no olvidarlo

Alcé mi brazo con suavidad. No respondí hasta que la profesora me dirigió la mirada y cuando lo hizo una voz suave y sensual emergió de entre la comisura de mis labios.

-¿Práctica y mucha concentracción?