En un lugar tétrico (alex)

Acababa de bajar del autobús noctámbulo; tanto el cobrador como el conductor parecían tener prisa por marcharse de allí, y no era de extrañar pues Little Hangleton, pese a ser un pueblo mayoritariamente muggle, se había convertido después de la última guerra mágica de gran Bretaña en uno de los considerados lugares más oscuros del país.

Caminé por las calles hasta llegar a un terreno santo, considerado no tan santo por la mayor parte de la sociedad mágica, pues era un lugar donde años atrás, antes de el inicio oficial de la última guerra habían sucedido cosas espantosas redactadas en algunos de los libros que había consultado para ampliar mis apuntes de Historia.

Abrí la reja y entre en el cementerio, sabía que no era muy prudente por mi parte visitar aquel lugar considerado por muchos maldito, pero mi curiosidad y mis ansias de conocimiento me impulsaban a seguir hacia adelante. Al poco rato oí un ruido a mi espalda e instintivamente saque la varita y me giré; sabía que si se trataba de algún mago estaba en un aprieto “depende de quien sea” y que si se trataba de algún muggle más me valdría salir corriendo, pues no se me daban bien los puños y seguramente el problema sería mayor teniendo la varita en la mano.

No sabía que me había llevado a aquél lugar,había soñado con el varias noches.Quería llegar a donde todo empezó,donde el gran Señor Tenebroso,tan querido e inculcado desde pequeño por mi padre,había comenzado su guerra mágica.
No tenía problemas para aparecerme,era algo que cada vez se me daba mejor,tenía demasiado tiempo libre.
Me aparecí en el cementerio de Little Hangleton,no había viajado nunca a ese lugar,pero lo había visto tan claro en mis sueños que era dificil olvidarlo.
Me aparecí detrás de una lápida,el epitafio rezaba :"A Gustav,sin suerte desde que nació"
Se me pusieron los pelo de punta,me abrigué mas con la túnica y de repente vi que no estaba solo allí,alguien mas se encontraba en el camposanto.
Para mi sorpresa su cara me era familiar,era un alumno del colegio,de Ravenclaw.Math Stone creo que se llamaba.
-Baja esa varita no vayas a hacerte daño-reí socarronamente-¿qué haces tu aquí?

Seguí a con la varita en la mano cuando esa persona me hablo, por lo que dijo supe que era mago, lo mire detenidamente y al poco rato me di cuenta de que su rostro me resultaba familiar, se trataba de un chico que había visto por Hogwarts de la casa Slytherin, volví a guardar la varita lentamente.

- Hola Alex – lo salude, pues creía que ese era su nombre - ¿Cómo iba a hacerme daño mi propia varita? – inquirí, pues su comentario era un tanto extraño – estoy aquí de excursión histórica – dije respondiendo a su pregunta - ¿y tu?

Me aparté a un lado del camino donde estuviera más iluminado sin dejar de mirar a Alex, volteé la mirada hacia lo más profundo del cementerio pensando en que quizá fuera mejor no estar a solas en aquel lugar lleno de piedras con nombres, inscripciones y fechas y con algún que otro mausoleo donde las familias solían reunirse después de muertos.

- Se que suena raro pero… ¿Qué tal si nos hacemos compañía mientras hagamos lo que tengamos que hacer aquí? – no tenía realmente miedo de estar a solas allí, por que sino no habría ido, pero siempre estaba bien contar con alguien por cualquier cosa que pudiera surgir.