Huyendo de los colmillos de la soledad [Emmeline]

Recuerdo del primer mensaje :

Todos en clase de Pociones y vos acá. Solo y con sueño. Cansado. ¿Cansado? Sí, cansado. No con sueño. Cansado. De los vivos. De los muertos. Oh fuck. Estar tanto expuesto a delirios te hace mal, Teo. Y terminas así, en un aula abandonada del tercer piso. Acostado en el escritorio del profesor. Rodillas levantadas. Mirando el uniforme techo. Buscando formas, como si fueran nubes y no manchas las que lo pueblan. Seguí faltando a clases y así te va a ir. Faltando para quedarte... ¿haciendo qué? ¿Algo interesante? Lo dudo. ¿Algo productivo? Bleh. ¿Algo que sirva para algo? No. ¿Para pesar acaso? No, ni eso. Tu mente vaga y te habla, pero no la escuchas. Veintidós pupitres mugrientos atrás tuyo. Veintidós. Un número. ¿Cómo estaría si estuviesen ocupados? ¿Si no estarías solo? Oh, claro que mejor. ¿O no? ¿O sí? Merlín, necesitas una distracción urgente.

-Sí, es su estilo... -dije sonriendo -. Emme... creo que lo amo -dije serio, sin sonrisa.

Giramos y sonreímos, estaba feliz.

-Aún no... sos la primera a la que se lo digo. Pero... no se si es tan bueno -le dije serio y me senté, apoyando mis brazos en mis piernas y mi cara en mis manos.

-Ya te conté mi desastroso pasado amoroso -le dije -. O casi todo... tengo miedo Emme. Tengo miedo de ser lastimado. Pero él... con él siento que seré feliz, que no lo hará. Que puedo volver a confiar en el amor... pero es difícil.

El apoyo de Emme era lo que necesitaba.

-Gracias por escucharme... siento que es el indicado, pero ¿y si no?

-Es lo que yo me digo, pero no es fácil. ¿Y si es el indicado? ¿Y si lo dejo partir? Fue tan rápido, tengo miedo de haberme equivocado...

Escuché su consejo... ¿qué era lo que mi corazón me decía?

-Emme, debo ir a buscar a Donogan... -le susurré, sin dejar de abrazarla...

-Deséame suerte... -le dije, saliendo de allí con expresión seria. Capaz que habría sido mejor hablar sobre Ann... capaz que la había confundido con mi reacción. Capaz que Emme me daba consejos si se lo contaba. Pero no pude. Lo mejor sería hablar con Donogan, ya le contaría todo a ella y a Ed.