Un interesante baño (Helena)

Cada vez que salia de clases me dirigia al baño de chicas, pues no me gustaba apestar a hufflepuff todo el dia, mi pensamiento era claro, pero el director no lo entendia, ¿por que debemos compartir clases con hufflepuff y los insufribles gryffindors. Creo que seria mejor que nos dieran clases separadas, asi nuestro aprendisaje seria mas rapido... ellos solo nos retazan.

En clases le habia mandado una nota a Helena para que nos juntaramos aqui, para que cuidara que nadie nos observara mientras tomaba mi baño.

Me saque la ropa y me puse la toalla en el cuerpo, me sente en un lavabo y espere pasientemente que llegara mi querida Helena.

Realmente es una hermosa sorpresa- dije con una sonrisa traviesa, sorprendiendola. Aveces me gustaba ser mas una criatura y andar en silencio para asustar a la gente, pero esta vez solo lo habia hecho por el placer de ver si con la sorpresa dejaba caer la toalla y me mostraba su blanca piel.
Me acerque a ella y bese su dos mejillas con delicadesa, andaba con el uniforme de la escuela, me gusta como me quedaba el verde aunque debia admitir que muchos dudaban que fuera una verdadera slytherin, pues no me importaba de que casa era si disfrutaba un poco de esa persona. Placer. Esa era la meta para todas mis actuaciones. –A mi tambien me gustaria ducharme un momento, estoy algo estresada despues de la clase de historia de la magia- frunci el ceño, el profesor se podria llamar amigo mio, pero habia algo de antagonismo entre los dos. Le sonrei traviesamente y empeze a deslisar mi falda hacia el piso, elegantemente me quite la blusa y las medias con los zapatos hasta quedar con mi ropa interior de seda verde. - ¿Te gusta como me queda, querida?

Al escuchar la voz de Helena un pequeño escalosfrios recorrio mi cuerpo, quizas por la sorpresa o solo por las ganas de verle, por una o por otra me sobresalte...

Observe cada fino movimiento de Hel, resivi sus besos y sonrei, aun sin bajarme del labavo en donde estaba sentada.

-Ni me lo digas... odio las clases, odio a los profesores, odio a los alumnos... creo que es mucho odio por un dia-

Era excitante ver como Helena se desvestia, Dios no me hagas esto. Creo que si fuera hombre Helena estaria en serios problemas, pero como era una chica podiamos divertirnos sin riesgo alguno.

-Dios- exclame cuando me mostro su ropa interior, y aunque preferia la ropa interior de algodon la de seda se veia esplendida en ella. Salte del lavabo y me acerque a ella.-Me encanta como te queda pero para mi gusto es una toalla o nada, si quieres te presto nada en la ducha- Sonrei de forma traviesa mientras acercaba mis labios a su cuello.

No te preocupes, no soy un fantasma- dije cuando vi como un pequeño escalofrió recorría su cuerpo. Realmente debía tener frio, el piso es de piedra.
Estaba sentada elegantemente en el lavado. Era obvio que era una slytherin- Así que te molesta los sangres sucias y las otras casas… si, yo he desarrollado un odio por algunos ravenclaws.- dije con una sonrisa divertida.
Sus movimientos eran realmente interesantes, mescla de elegancia y un poco de salvaje. Como una pantera. Le sonreí cuando dijo lo de la toalla, con un movimiento simple me deshize de la ropa interior, no me daba vergüenza estar desnuda. Camine elegantemente hacia la ducha- Apuesto que vas a querer que te enjabone la espalda- dije con una sonrisa coqueta.- Puedo enjabonarte todo lo que quieras…

Helena era refinada, delicada y extremadamente sensual, su cuerpo era perfecto... Sin duda haria que cualquiera dudara,osea, los hombres se vuelven mas hombre y las mujeres, bueno, ya entendieron. En mi caso particular, me encantaba verla vestida o desvestida, pues sus moviniento con o sin ropa eran suaves y naturales.

-Creo que me has ganado, yo queria quitarte la ropa- dije mientras sonreia de forma coqueta.

Solte mi toalla y la segui a la ducha, me pare en la puerta esperando a que Helena se metiera al agua, realmente queria ver como caia el agua sobre su tersa piel.

¿Me querias desvestir? - pregunte un poco sorprendida, pero me acerque a ella, junte mi cuerpo al suyo suavemente, para sentir su calida piel. Tome de mi muñeca una liga que siempre traia y me preocupe en hacerle un moño al cabello de Annabelle, su cabello como ella era salvaje y negro. Cuando su cabello estuvo bien agarrado, le sonrei- No querria que tu cabello se moje hasta que yo tenga que lavarlo.- Me acerque al agua, me agache para tocarlo con el dedo, estaba tibia, entre a la bañera y me meti suavemente con un suave gemido de placer- Oh... realmente amo lo caliente...- mis ojos pasaron a ella y la recorri con la mirada, ella se podria caracterizar por ser caliente.- Acercate, querida, no muerdo... mucho.

Observe cada movimiento con cuidado, Helena era una mujer con incontables cualidades, cada una de ellas digna de una Slytherin.

Sonrei y me acerque a ella -Supongo que me toca bañarte- tome una esponja y le heche un poquito de una pocion de chocolate, la puse en su espalda y comence a frotarla con suavidad, no queria dañar tan perfecta piel.